Por la boca suele morir el pez

Para no quedarse detrás el Sr. Arenas Bocanegra, no pierda un minuto sin exigir dimisiones en el gobierno andaluz por el caso de los ERE, que siendo ciertas las denuncias, no es menos cierto, que sus responsables han sido apartados de sus responsabilidades, compareciendo como acusación el propio gobierno andaluz. El Sr. Arenas no consigue girar su cuello hacia el corazón del mar Mediterráneo, donde el Fallero Mayor del Gürtell, hace “manitas” con su compañero Mariano que ya se le ha ofrecido para: “Estar delante, detrás o a su lado” que es lo que últimamente hace, para lucir su atlético esqueleto en las fiestas falleras, de tanto rango y dispendio, a pesar de estar endeudados hasta las cejas.

Y que, pudiéramos decir de la locuacidad del “niño del salmón” de este archipiélago nuestro. Encantado él, de dar “primicias” sobre el “Poltergeist” padecido por un ordenador conectado al inviolable “Atlante” delicia y regocijo del funcionariado de la tan denostada justicia de nuestra Comunidad Autónoma. Me da la sensación, que a pesar de las apariencias, no son pescado fino, pues pican en cualquier engodo, como vulgares lebranchos. Y a las pruebas me remito. Calentitas aún, las declaraciones de María Dolores de Cospedal, otra locuaz encantadora de serpientes que acaba de decirle a todos los españoles que: “El Partido Popular se va a comportar con las decisiones tomadas por el Gobierno de Zapatero, concernientes a Libia”. De estas declaraciones se deduce que por lo general el comportamiento del P.P. para con el gobierno de la nación deja mucho que desear. No hacía falta que nos lo confirmara, ya sabíamos que sus correligionarios y sus mediáticos cavernarios, que presumen de profesionales con “finura”, nos dan ejemplos de rancia españolidad, a diario; como el Sr. García Serrano tertuliano de la voz e imagen oficial del partido. Su idolatrada Intereconomía, que nos ha hecho participe de sus pensamientos con respeto a los Tribunales: “Yo me paso por el forro del escroto al Tribunal Europeo de Derechos, de no sé qué” se refería el deslenguado “académico” a los Derechos Humanos. Lo dicho: para los lebranchos cualquier engolo es bueno, aunque proceda de algún emisario submarino cercano a su charco.

Antonio Ortega Santana

Para no quedarse detrás el Sr. Arenas Bocanegra, no pierda un minuto sin exigir dimisiones en el gobierno andaluz por el caso de los ERE, que siendo ciertas las denuncias, no es menos cierto, que sus responsables han sido apartados de sus responsabilidades, compareciendo como acusación el propio gobierno andaluz. El Sr. Arenas no consigue girar su cuello hacia el corazón del mar Mediterráneo, donde el Fallero Mayor del Gürtell, hace “manitas” con su compañero Mariano que ya se le ha ofrecido para: “Estar delante, detrás o a su lado” que es lo que últimamente hace, para lucir su atlético esqueleto en las fiestas falleras, de tanto rango y dispendio, a pesar de estar endeudados hasta las cejas.

Y que, pudiéramos decir de la locuacidad del “niño del salmón” de este archipiélago nuestro. Encantado él, de dar “primicias” sobre el “Poltergeist” padecido por un ordenador conectado al inviolable “Atlante” delicia y regocijo del funcionariado de la tan denostada justicia de nuestra Comunidad Autónoma. Me da la sensación, que a pesar de las apariencias, no son pescado fino, pues pican en cualquier engodo, como vulgares lebranchos. Y a las pruebas me remito. Calentitas aún, las declaraciones de María Dolores de Cospedal, otra locuaz encantadora de serpientes que acaba de decirle a todos los españoles que: “El Partido Popular se va a comportar con las decisiones tomadas por el Gobierno de Zapatero, concernientes a Libia”. De estas declaraciones se deduce que por lo general el comportamiento del P.P. para con el gobierno de la nación deja mucho que desear. No hacía falta que nos lo confirmara, ya sabíamos que sus correligionarios y sus mediáticos cavernarios, que presumen de profesionales con “finura”, nos dan ejemplos de rancia españolidad, a diario; como el Sr. García Serrano tertuliano de la voz e imagen oficial del partido. Su idolatrada Intereconomía, que nos ha hecho participe de sus pensamientos con respeto a los Tribunales: “Yo me paso por el forro del escroto al Tribunal Europeo de Derechos, de no sé qué” se refería el deslenguado “académico” a los Derechos Humanos. Lo dicho: para los lebranchos cualquier engolo es bueno, aunque proceda de algún emisario submarino cercano a su charco.