Espacio de opinión de Canarias Ahora
Especular con el balón
Bueno, en bajarse de la dicha rosácea oficialmente, porque no podía ignorar que CC y PP quieren darnos otros cuatro años de lo mismo; o de lo peor, pues, queridísimos míos, a poco salgan con bien de las urnas, sacarán la lógica conclusión de que al electorado le va la marcha, que respalda su manera de hacer las cosas y que no hay, por tanto, motivo alguno para no reforzar la dosis; sarna con gusto no pica, es fama.López Aguilar ha constatado, pues, que los animalitos se conocen y entienden. Se vio claro cuando el apaño de las conclusiones parlamentarias de la trama eólica y del caso Amorós; ése conchabo fue el espíritu que animó a Mar Julios a desaconsejar que se procediera judicialmente contra el macho Soria por mentir como compareciente en la comisión del Eolo. Caimán no come caimán, ya saben.Lo dicho: López Aguilar ha tomado tierra ante lo que tiene por delante. Sin embargo, ocurre que el PSC sigue sin abandonar su ambigüedad mantenida en la oposición a lo largo de la legislatura que acaba. Los críticos futboleros suelen decir que un equipo Âespecula demasiado cuando tiene el balón más o menos controlado entre la defensa y el centro del campo y no acabar de decidirse a ir por el gol. Con lo que se expone a perder el partido en cualquier rechace. Creo que este préstamo de los futboleros describe mejor la actitud del PSC en los cuatro últimos años que el tópico de las de cal y las de arena; que las ha habido, por supuesto.Buena muestra es lo ocurrido con el anunciado debate de los tres principales candidatos a la presidencia de Canarias. Querían celebrarlo en la SER dada su mayor audiencia, pero el PP se opuso y los psocialistas aceptaron pasarlo a Radio Nacional con lo que, técnicamente, respaldaron el boicot pepero al grupo Prisa, propietario de la cadena. Profesionalmente, nada que objetar a ninguna de las dos emisoras, pero, qué quieren, está feo legitimar el boicot ante un electorado necesitado como nunca de posturas claras y clarificadoras. De tanto especular el PSC con el balón, acabaron cogiéndole un rechace y gol.
Bueno, en bajarse de la dicha rosácea oficialmente, porque no podía ignorar que CC y PP quieren darnos otros cuatro años de lo mismo; o de lo peor, pues, queridísimos míos, a poco salgan con bien de las urnas, sacarán la lógica conclusión de que al electorado le va la marcha, que respalda su manera de hacer las cosas y que no hay, por tanto, motivo alguno para no reforzar la dosis; sarna con gusto no pica, es fama.López Aguilar ha constatado, pues, que los animalitos se conocen y entienden. Se vio claro cuando el apaño de las conclusiones parlamentarias de la trama eólica y del caso Amorós; ése conchabo fue el espíritu que animó a Mar Julios a desaconsejar que se procediera judicialmente contra el macho Soria por mentir como compareciente en la comisión del Eolo. Caimán no come caimán, ya saben.Lo dicho: López Aguilar ha tomado tierra ante lo que tiene por delante. Sin embargo, ocurre que el PSC sigue sin abandonar su ambigüedad mantenida en la oposición a lo largo de la legislatura que acaba. Los críticos futboleros suelen decir que un equipo Âespecula demasiado cuando tiene el balón más o menos controlado entre la defensa y el centro del campo y no acabar de decidirse a ir por el gol. Con lo que se expone a perder el partido en cualquier rechace. Creo que este préstamo de los futboleros describe mejor la actitud del PSC en los cuatro últimos años que el tópico de las de cal y las de arena; que las ha habido, por supuesto.Buena muestra es lo ocurrido con el anunciado debate de los tres principales candidatos a la presidencia de Canarias. Querían celebrarlo en la SER dada su mayor audiencia, pero el PP se opuso y los psocialistas aceptaron pasarlo a Radio Nacional con lo que, técnicamente, respaldaron el boicot pepero al grupo Prisa, propietario de la cadena. Profesionalmente, nada que objetar a ninguna de las dos emisoras, pero, qué quieren, está feo legitimar el boicot ante un electorado necesitado como nunca de posturas claras y clarificadoras. De tanto especular el PSC con el balón, acabaron cogiéndole un rechace y gol.