Espacio de opinión de Canarias Ahora
¿Guaguas o no Guaguas? (II) por David Najor Hernández Lorenzo
Por si queda algún despistado que no se haya enterado, Guaguas Municipales, antes Jardineras Guaguas y ahora en crisis millonaria, tiene colgado el cartel de Se Vende. Es un cartelito ese que llevan mucho tiempo deseando colgarle, tanto los que están ahora como los que estuvieron antes, porque unos y otros han ejecutado la empresa por la vía rápida, a base de tiros en la nuca, por la espalda y con nocturnidad y alevosía. Los primeros convirtiendo una empresa altamente rentable en deficitaria a base de tarifas especiales que luego se olvidaban de compensar, los segundos con su ineptitud manteniendo el legado horroroso que recibieron sumándole su propia incapacidad para gestionar nada, y los dos al mantener a los directivos de Guaguas donde estaban, en el centro del problema. Creándolo.
Esta semana pasada cuentan las malas lenguas, y también las buenas e informadas, que se le pidió a nuestro queridísimo Jero, Don Jerónimo ante las cámaras, la cabeza del gestor de Guaguas por incompetente, incapaz y otras lindezas que mejor no decir en público y claro, en mi ingenuidad me puse a buscar periódico tras periódico a ver cómo trataban el bombazo. Pero como decía, las portadas suelen contener chistes más que otra cosa, y sobre Guaguas lo que se dice son las palabras exactas de Saavedra: “Esto es cosa del Cabildo, yo me lavo las manos, que a Pilatos le funcionó”.
Como ya se dijo en alguna parte, a Jero Saavedra le hace falta un buen par de gafas, porque por lo visto no acabó de leer lo de “Municipales” en las Guaguas. Que, como todo jurista, que es su caso, sabe, viene de “Municipio”, que casualmente es gobernado por un Ayuntamiento, del que, cosas de la vida, Saavedra es Alcalde. ¿Será que sigue sin tener eso último muy claro? ¿Será que en realidad él no pinta nada y ahí dentro cada cual hace lo que quiere?
Eso es lo que dicen otras lenguas bien informadas, que comentan que ciertos concejales de Ayuntamiento no se llevan nada bien, hasta el punto de que uno no se acordó de que había que pagar a los guagüeros y el otro, en un alarde de seriedad, respeto por el cargo e infantilismo no se lo recordó, para reírse un rato a su costa, al parecer.
Aún así, todo esto no es nuevo para los canarios, que ya tuvieron el placer, y disculpen la carcajada, de tener a Jero de presidente del Gobierno de Canarias, y ya por esa época tenía una excusa muy recurrente, que venía a ser “no es culpa mía, es culpa de mi equipo, que no lo hace bien”. Ahora ya nos ha pedido perdón a todos por las niñerías de dos hombres hechos y derechos que han montado este lío, pero no ha aprendido ni ha cambiado.
Ahora nuestro queridísimo señor alcalde nos dice que él no tiene culpa ninguna en el “descuido” de los sueldos que no pagaron a tiempo, y que tampoco tiene culpa de nada, que todo es cosa del Cabildo. Pero claro, el Cabildo, en concreto, la Autoridad Única del Transporte, con Román Rodríguez por dirigente, le dijo que de eso ni hablar, que ni harto de agua con mucho gas le va a pagar una deuda millonaria a Guaguas para que luego Jero la venda y despiece al mejor postor. Que si tantos compradores tiene, lo mismo va a resultar que la empresa es muy rentable después de todo; porque, entre nosotros, si yo hago una oferta por una empresa con treinta milloncillos de deuda de nada, una de dos, o estoy seguro de que los voy a recuperar con tranquilidad, o me falta un tornillo. Cuando somos tres los que hacemos una oferta, entonces a mí por lo menos me queda claro que es un buen negocio. Cuando estos buenos negocios se hacen con ayuda de políticos, lo llamamos pelotazos, y a los políticos implicados, corruptos.
Mientras tanto, yo sigo riéndome un rato largo con las portadas, que se olvidan, qué despistadas ellas, de mencionar “los problemillas internos” que Jero está creando en su partido, en sus intentos de quitarse el muerto, con perdón, de encima, o de las infantilidades e incompetencias varias de nuestro queridísimo Ayuntamiento.
Me pregunto yo qué culpa tendrá el chófer que a día de hoy no sabe si tiene que ir buscando trabajo para enero, cuántos amiguitos tendrá el gestor de Guaguas para haber aguantado hasta hoy con un sueldazo siendo un incompetente, o cuándo se pondrá Saavedra a hacer su trabajo y dejará de echarle la culpa a todos los demás.
En fin, seguiré ojeando las portadas, a ver si en alguna se equivocan y dicen la verdad clara, por su nombre y sin rodeos. Sigo pecando de optimista ¿verdad?
*Miembro de Jóvenes de Nueva Canarias, en Las Palmas de Gran Canaria
David Najor Hernández Lorenzo*
Por si queda algún despistado que no se haya enterado, Guaguas Municipales, antes Jardineras Guaguas y ahora en crisis millonaria, tiene colgado el cartel de Se Vende. Es un cartelito ese que llevan mucho tiempo deseando colgarle, tanto los que están ahora como los que estuvieron antes, porque unos y otros han ejecutado la empresa por la vía rápida, a base de tiros en la nuca, por la espalda y con nocturnidad y alevosía. Los primeros convirtiendo una empresa altamente rentable en deficitaria a base de tarifas especiales que luego se olvidaban de compensar, los segundos con su ineptitud manteniendo el legado horroroso que recibieron sumándole su propia incapacidad para gestionar nada, y los dos al mantener a los directivos de Guaguas donde estaban, en el centro del problema. Creándolo.
Esta semana pasada cuentan las malas lenguas, y también las buenas e informadas, que se le pidió a nuestro queridísimo Jero, Don Jerónimo ante las cámaras, la cabeza del gestor de Guaguas por incompetente, incapaz y otras lindezas que mejor no decir en público y claro, en mi ingenuidad me puse a buscar periódico tras periódico a ver cómo trataban el bombazo. Pero como decía, las portadas suelen contener chistes más que otra cosa, y sobre Guaguas lo que se dice son las palabras exactas de Saavedra: “Esto es cosa del Cabildo, yo me lavo las manos, que a Pilatos le funcionó”.