Espacio de opinión de Canarias Ahora
Imputados heroicos
No es la primera vez que los imputados en alguno de los casos de corrupción son recibidos, tras dejársele en libertad con cargos, como a ganadores de la Champion. Ocurrió en Telde y también ocurrió en su día, no lo olviden, cuando el Hermoso Manuel fue sacado a hombros del Juzgado después de archivársele no recuerdo qué asunto porque hoy tengo prisa y no me apetece consultar el archivo. Pero el entusiasmo fue el mismo, ya digo. El que se hubiera producido con Miguel Zerolo, caso de comparecer en un Juzgado santacrucero y no en el TSJC, que lo metió y lo sacó por la puerta de atrás.Alguna vez me he referido a estos comportamientos y sigo sin saber a qué atribuirlos. Supongo lógica la alegría de familiares y amigos porque el encartado no vaya a prisión, pero, la verdad, me parece manifestación excesiva cuando se les deja en libertad con cargos de cosas como que muy feas. Los hay, incluso, que han salido haciendo el signo de tampoco sé muy bien qué victoria.No faltan quienes atribuyen esos júbilos a que los imputados han actuado supuestamente en plan Robin Hood y quien más, quien menos, le debe algún favor del tipo que sea y no quieren pecar de desagradecidos. El clientelismo, ya saben. Otros hilan más fino a cuenta de los valores y prestigios institucionales y lamentan unas expresiones que consideran de desconfianza hacia la Justicia; con la variante de quienes atribuyen las tribulaciones de los encartados a manejos políticos del aparato del Estado, que es la explicación preferida de CC y PP; a pesar de que no les ha ido del todo mal con los jueces; al menos a sus máximos dirigentes, con lo que me temo que la desconfianza en la Justicia que siembran acabará por resultarles un tirar las piedras sobre el propio tejado.No sé qué decirles, repito. Sólo tengo claro que estos imputados no son héroes, pero no he logrado averiguar qué coño son para que los homenajeen al modo.
No es la primera vez que los imputados en alguno de los casos de corrupción son recibidos, tras dejársele en libertad con cargos, como a ganadores de la Champion. Ocurrió en Telde y también ocurrió en su día, no lo olviden, cuando el Hermoso Manuel fue sacado a hombros del Juzgado después de archivársele no recuerdo qué asunto porque hoy tengo prisa y no me apetece consultar el archivo. Pero el entusiasmo fue el mismo, ya digo. El que se hubiera producido con Miguel Zerolo, caso de comparecer en un Juzgado santacrucero y no en el TSJC, que lo metió y lo sacó por la puerta de atrás.Alguna vez me he referido a estos comportamientos y sigo sin saber a qué atribuirlos. Supongo lógica la alegría de familiares y amigos porque el encartado no vaya a prisión, pero, la verdad, me parece manifestación excesiva cuando se les deja en libertad con cargos de cosas como que muy feas. Los hay, incluso, que han salido haciendo el signo de tampoco sé muy bien qué victoria.No faltan quienes atribuyen esos júbilos a que los imputados han actuado supuestamente en plan Robin Hood y quien más, quien menos, le debe algún favor del tipo que sea y no quieren pecar de desagradecidos. El clientelismo, ya saben. Otros hilan más fino a cuenta de los valores y prestigios institucionales y lamentan unas expresiones que consideran de desconfianza hacia la Justicia; con la variante de quienes atribuyen las tribulaciones de los encartados a manejos políticos del aparato del Estado, que es la explicación preferida de CC y PP; a pesar de que no les ha ido del todo mal con los jueces; al menos a sus máximos dirigentes, con lo que me temo que la desconfianza en la Justicia que siembran acabará por resultarles un tirar las piedras sobre el propio tejado.No sé qué decirles, repito. Sólo tengo claro que estos imputados no son héroes, pero no he logrado averiguar qué coño son para que los homenajeen al modo.