Marino Alduán, de señor y señoría por Ignacio Morán Rubio

Resulta ya evidente que los votos de CC-ATI no computaran en los resultados finales de esta provincia pero, otra vez, le harán un trabajo impagable al PP y a la isla de Tenerife. La desintegración de Coalición Canaria que empezó a concretarse en el último tramo de la legislatura, ha venido a clarificar y a ajustar el panorama electoral de Gran Canaria, pero aun está por ver a quien y cuantas cosas arrastra en su caída. Para sectores sociales cada día más amplios, el fracaso anunciado de CC- ATI se debe a errores propios y a la creencia de que el sistema democrático y a la gente, se la puede manipular al antojo paranoico de “maestros” de la política. Otra vez el poder del dinero no habrá servido en política y despliegue publicitario en guaguas, radios, teles, anuncios pagados y “pagados”, quedarán en el recuerdo.

Marino Alduán de Nueva Canarias y López Aguilar del Partido Socialista representan el progresismo y las sensibilidades más sociales del electorado. El uno es candidato de un partido cuyos principales esfuerzos se centran en esta tierra, el otro es candidato del principal partido de la izquierda española. La señora Guerra, del Partido Popular, recoge los dictados y agita las aguas conservadoras e incluso revisionistas del señor Soria y del claro Rajoy. El señor Bañolas de Coalición Canaria-ATI pide que hablen los canarios y hablarán para dejarlo en su sitio y en silencio. Así veo el cuadro para la reflexión.

La única voz nacionalista de esta provincia con posibilidades reales de ser diputado en Madrid es Marino Aduán. Sólo él estará en condiciones de hablar y defender, sin interferencias, los intereses de esta tierra. Descartadas las opciones del nacionalismo tutelado por ATI-PP, no queda otra a quien se sienta tal, que ser consecuente y arrimar el hombro, multiplicar el voto en un trabajo de militancia y dejar atrás los mercadeos vergonzantes de los intereses de esta Isla

El nacionalismo de Nueva Canarias, progresista, abierto a la modernidad y a los retos que la globalidad nos plantea, alejado de quimeras y chauvinismos trasnochados? es el nacionalismo que necesita de esta oportunidad. Las identidades históricas, culturales, económicas, geográficas?no son ancla sino el viento que ayuda a concretar más y a gestionar mejor esas propuestas progresistas y además les aportan una visión más cercana y más querida por la gente. Estoy convencido de que la provincia de Las Palmas, abierta y cosmopolita va a ser el punto cero en la política nacional de Nueva Canarias.

Marino Alduán reúne de forma inequívoca el perfil para ser el ave fénix de un nacionalismo serio, integrador y acreedor de todos los respetos. Una formación sólida y treinta años en la brega social le avalan y le aportan la experiencia necesaria para mantener un rumbo fijo: La defensa de los intereses de los ciudadanos de Canarias, desde posiciones ideológicas firmes, valientes y rigurosas.El candidato de Nueva Canarias al Congreso de los Diputados ha demostrado en su dilatada gestión pública ser un señor de ética intachable, cercano al administrado, en todo momento dueño de si mismo, decoroso en su relación con el poder, respetable? si el próximo domingo los ciudadanos/as le damos apoyo suficiente podemos tener la seguridad de que no habrá distracciones en su gestión legislativa, ni tampoco en las tareas de apoyo que en Madrid requiere Telde y en general las instituciones canarias.

En su nueva dignidad de señoría, Marino Alduán, seguirá siendo un señor y mantendrá la naturalidad con aquello que le ata a su humanismo, a su gente y a Canarias, otra buena razón para otorgarle nuestra confianza. Ignacio Morán Rubio

Resulta ya evidente que los votos de CC-ATI no computaran en los resultados finales de esta provincia pero, otra vez, le harán un trabajo impagable al PP y a la isla de Tenerife. La desintegración de Coalición Canaria que empezó a concretarse en el último tramo de la legislatura, ha venido a clarificar y a ajustar el panorama electoral de Gran Canaria, pero aun está por ver a quien y cuantas cosas arrastra en su caída. Para sectores sociales cada día más amplios, el fracaso anunciado de CC- ATI se debe a errores propios y a la creencia de que el sistema democrático y a la gente, se la puede manipular al antojo paranoico de “maestros” de la política. Otra vez el poder del dinero no habrá servido en política y despliegue publicitario en guaguas, radios, teles, anuncios pagados y “pagados”, quedarán en el recuerdo.

Marino Alduán de Nueva Canarias y López Aguilar del Partido Socialista representan el progresismo y las sensibilidades más sociales del electorado. El uno es candidato de un partido cuyos principales esfuerzos se centran en esta tierra, el otro es candidato del principal partido de la izquierda española. La señora Guerra, del Partido Popular, recoge los dictados y agita las aguas conservadoras e incluso revisionistas del señor Soria y del claro Rajoy. El señor Bañolas de Coalición Canaria-ATI pide que hablen los canarios y hablarán para dejarlo en su sitio y en silencio. Así veo el cuadro para la reflexión.