Espacio de opinión de Canarias Ahora
Nadar y guardar la ropa
Olvida, CCOO, que no se puede ser juez y parte y ellos fueron siempre y siguen siéndolo, más parte que jueces. Olvida, CCOO, que llamó al profesorado, hace ya 20 meses, a luchar por lo que todos considerábamos un derecho, pero que para algunos era un mero instrumento para erigirse ante los docentes como “conseguidores” -no te traigo la Homologación, pero sí sexenios, a cambio, eso sí, de un aumento de tu jornada laboral y de un generoso lustre a la gestión del Gobierno- y como eficientes “capataces de obra” ante la patronal -¿vez como soy capaz de controlar al personal y llevarlo al redil?-.
Olvida CCOO la rapidez con la que se desentendió de una reivindicación, basada en el derecho, para alentar y justificar el mercadeo de nuestra dignidad y cargar sobre nuestras espaldas, por unas pocas monedas, toda la responsabilidad sobre la calidad de la enseñanza.
Parece haber olvidado también su análisis sobre los resultados del referéndum del 30 del pasado enero, aquél en el que el profesorado dijo con rotundidad “sabemos lo que queremos”.
No cabe duda de que CCOO ha borrado de su memoria incluso, cómo cargó contra su propia gente cuando sus bases los desautorizaron y cómo arremetió contra el Comité de Huelga cuando éste le ofrecía reconstruir la unidad sindical.
Ya no recuerda CCOO que, como quien no quiere la cosa, ofreció a la Consejería de Educación uno de los últimos argumentos recurridos, en su errático discurso, para negar la reivindicación del profesorado y es que, de repente y de forma “casual”, ambos concluyeron que la resolución del conflicto quedaba en manos de los jueces y se apresuraron, casi al unísono, a concretar hasta la hora en la que habría de producirse la vista de la sentencia. ¿Recordarán la felicitación de Dª Milagros Luis Brito por la responsabilidad demostrada?
Tal vez, a pesar de lo reciente, ningún dirigente de CCOO tenga ya en mente sus propias palabras, en la llamada Mesa de Calidad, en relación a las “horas extraordinarias” ofrecidas por D. Paulino a los docentes ?Apertura Temprana y Refuerzo Educativo-, como forma de zanjar las reivindicaciones retributivas ?Homologación era palabra tabú en ese foro-.
¿Habrá olvidado CCOO su valoración del INICIO DE CURSO y su feliz coincidencia con la Sra. Consejera en el término empleado: NORMALIDAD?
Ahora, repentinamente, para CCOO la Homologación se ha vuelto a convertir en un “elemento central que debe ser resuelto, a la mayor brevedad posible y de forma extrajudicial” y se ofrecen, sin sonrojo, a ser los “mediadores” que encarrilen esa vía de solución.
Aquí huele a humo ¿Se estará cocinando algo? ¿Habrá pensado algunos que el profesorado está derrotado y que es el momento de “sacar de la chistera”, maquillado y perfilado, aquel vergonzoso preacuerdo rechazado por el profesorado?
En algún lugar leí que “las casualidades son las cicatrices que va marcando el destino” .
No sé si será casualidad, pero nada más conocerse la nueva convocatoria de huelga del profesorado se produjeron dos curiosos eventos informativos: de un lado, este repentino cambio de discurso de CCOO reclamando, ahora si, una solución extrajudicial -lo que venimos pidiendo desde hace ya 21 meses- y de otro, la publicación, por parte de la Consejería de Educación, del dinero ahorrado en base a los descuentos aplicados a los docentes por secundar las jornadas de huelga anteriores. Por cierto, lo que no ha dicho la Administración es a dónde han ido a parar esos ocho millones de euros; desde luego, no a la mejora del sistema educativo, como bien han comprobado las familias canarias en este desastroso inicio de curso.
¿Amnesia selectiva? ¿Cambio estratégico? ¿Revisión de posición? ¿O tal vez y simplemente, “querer nadar y guardar la ropa”?
¿Recuerda alguien aquella canción de Joan Manuel Serrat: “Yo me manejo bien con todo el mundo”?
El día 30 de octubre, en manifestaciones convocadas en todas las islas, la sociedad canaria, frente a la más calamitosa gestión educativa que hayamos vivido (por mucha campaña publicitaria que financie el ejecutivo canario para convencernos de lo contrario, “lo que es, es”), tendrá la oportunidad de defender el derecho a una educación digna, pública y gratuita y a exigir, a este gobierno, un punto de inflexión en su política. Puedo imaginar, estoy convencido de ello, que allí podremos ver a muchos militantes de base de CCOO, de esos de toda la vida, pero me pregunto si se dejarán caer algunos de sus dirigentes.
Los días 4, 5 y 6 de noviembre, de no mediar esa voluntad de diálogo ?imperceptible en este conflicto- , de la que presume el señor presidente, los docentes de Canarias iremos a la huelga.
¿Dónde estará CCOO?
*Miembro de EA-Canarias y representante de esta organización en el Comité de Huelga por la Homologación del Profesorado no Universitario de Canarias.
Adolfo Padrón Berriel*
Olvida, CCOO, que no se puede ser juez y parte y ellos fueron siempre y siguen siéndolo, más parte que jueces. Olvida, CCOO, que llamó al profesorado, hace ya 20 meses, a luchar por lo que todos considerábamos un derecho, pero que para algunos era un mero instrumento para erigirse ante los docentes como “conseguidores” -no te traigo la Homologación, pero sí sexenios, a cambio, eso sí, de un aumento de tu jornada laboral y de un generoso lustre a la gestión del Gobierno- y como eficientes “capataces de obra” ante la patronal -¿vez como soy capaz de controlar al personal y llevarlo al redil?-.
Olvida CCOO la rapidez con la que se desentendió de una reivindicación, basada en el derecho, para alentar y justificar el mercadeo de nuestra dignidad y cargar sobre nuestras espaldas, por unas pocas monedas, toda la responsabilidad sobre la calidad de la enseñanza.