Espacio de opinión de Canarias Ahora
El negocio audiovisual por M. Carmen Romero Espino
¿A que venía ese repentino interés por las productoras canarias cuando la forma habitual de trabajar de la televisión ATInómica y, en general, del Gobierno de Canarias, consistía en despreciar a las empresas isleñas contratando con empresas peninsulares la realización de programas o de campañas promocionales?
¿Finalmente se enteraron los que manejan el dinero público que las empresas peninsulares, dado el alto coste de desplazamiento del material y del personal hasta las islas, lo que hacían era subcontratar a las empresas de aquí? Con tan rocambolesca forma de actuar al final el trabajo era realizado por empresas canarias pero se pagaba a las de fuera un precio muy superior al de mercado. Ante tal situación, algunas empresas se reconvirtieron de productoras en arrendadoras de material audiovisual e hicieron su agosto.
Con ese olfato que tienen nuestro políticos para los negocios, con el fin de que los pingües beneficios quedaran en casa, decidieron promover la creación de “nuevas” empresas canarias de producción audiovisual.
Ahora, para entretenernos durante las vacaciones estivales, podemos ver una de las dos grandes superproducciones canarias. Por un lado tenemos la versión isleña de “Los Tres Caballeros” en la que Donald, José Carioca y Panchito, tres héroes que luchan contra los medios por revelar la verdad, nos llevan de viaje por el maravilloso mundo del trapicheo canario.
Por otro lado podemos ver “La vuelta al mundo de Willy Fox”, fantástica historia protagonizada por un muchacho empeñado en hacer el bien, sobre todo a sus amigos.
Y es que por algo llaman a estas islas Las Afortunadas: aquí los dependientes pueden esperar pacientemente que lleguen sus ayudas viendo “quiero ser como Pepe” M. Carmen Romero Espino
¿A que venía ese repentino interés por las productoras canarias cuando la forma habitual de trabajar de la televisión ATInómica y, en general, del Gobierno de Canarias, consistía en despreciar a las empresas isleñas contratando con empresas peninsulares la realización de programas o de campañas promocionales?
¿Finalmente se enteraron los que manejan el dinero público que las empresas peninsulares, dado el alto coste de desplazamiento del material y del personal hasta las islas, lo que hacían era subcontratar a las empresas de aquí? Con tan rocambolesca forma de actuar al final el trabajo era realizado por empresas canarias pero se pagaba a las de fuera un precio muy superior al de mercado. Ante tal situación, algunas empresas se reconvirtieron de productoras en arrendadoras de material audiovisual e hicieron su agosto.