Te pido que no mueras así, Aminatou

Después de un cúmulo de circunstancias, de quién y por qué se te dejó entrar en Lanzarote, sabiendo que ya eso no tiene remedio y que surgen distintas versiones con alguna que otra torpeza en el clásico intento de matar al mensajero; haré lo contrario de lo que decía recientemente Rodríguez Ibarra que hacemos; no callaré “me atreveré a levantar la voz”, a reconocer nuestros fallos; pero me niego a que se culpabilice a ningún funcionario. Créeme Aminatou, ninguna de las personas que intervino en todo esto actúo de mala fe, ó intentó ocasionarte algún daño a ti, o a tus causas; que en mi modesta opinión, son nobles, justas y perfectamente legítimas.

Somos muchos en Canarias los que recordamos cómo en los setenta madres y padres lloraban en estas islas por lo que se les venía encima; sus hijos, jovencitos de remplazo, eran enviados al Sahara, tu tierra, para detener la Marcha Verde; a un territorio hostil, casi en guerra y sin ningún tipo de preparación. Desde aquí, nadie pudo entender como ocurrió todo aquello, en especial los militares que en primera persona fueron abandonados ante el avance del régimen marroquí; se sintieron tan humillados y traicionados -por la dictadura del momento- como ustedes. Pero recuerda que Marruecos es el país mimado del norte de África; se ha convertido en la despensa de Francia a precios mucho más asequibles que los de cualquier país de la CEE y por otro lado es el gran aliado militar de EEUU en su lucha -más mediática que real- contra el integrismo de Al Qaeda; con el consiguiente apoyo económico que llena las arcas de unos pocos, mientras el pueblo pasa hambre, miseria, miedo y represión. En consecuencia tolerancia cero para esa monarquía corrupta

Lo único importante ahora es que dejes la huelga de hambre y continúes luchando por tu pueblo, por los tuyos, por tus hijos, por tu vida desde la mayor lucidez y con todas tus fuerzas recuperadas. Sé que no podemos pensar igual; la vida te ha impuesto esa realidad, ese grado de desesperación serena que te envuelve a ti y a tu pueblo, sumergidos en una lucha tan desigual que sólo se puede combatir con actitudes tan llenas de dignidad. Incluso lo cultural nos distancia a la hora de analizar lo que está ocurriendo, porque a estas alturas, los habitantes de Canarias, de España, no vemos ningún tipo de utilidad en el martirio, nos parece llamativo pero estéril. Percibimos nítidamente que la noticia mundial de hoy, mañana será olvido.

Hoy querida Aminatou -aunque no lo quieras reconocer- tú y los tuyos tienen un nuevo patrimonio que proteger, es tu propia vida; ese liderazgo natural que tienes, esa imagen mediática tan potente que proyectas, el reconocimiento que has adquirido como “Luchadora por la Libertad”; no sólo le hace falta a tu pueblo, sino a toda la humanidad pero especialmente a nosotros, los que nos llamamos occidentales. Tu condición de mujer y árabe te hace más representativa en un mundo eminentemente machista; tu actuación ha abierto un antes y un después en el conflicto saharaui.

Por todo eso, pero sobre todo por tu valentía, no puedes decepcionarnos, no puedes, bueno, creo que no debes imponernos el plazo de tu propia resistencia física porque acabarás convirtiéndolo en un suicidio carente de valor. No doblegarse es resistir y para eso hay que estar vivo. Una mujer fuerte como tú no puede humillarse ante el tirano y pese a los que te acompañan, desde mi humildad te digo déjalo ya, recupérate y sigue luchando; no te conviertas en un mito tipo Che, de imagen glamurosa y negocios carroñeros de causas reivindicativas. Como te queremos es en la lucha.

* Secretaria de Formación de la Agrupación Local del PSC-PSOE de Santa Cruz de Tenerife

Carmen Coello *