Pobreza imparable

Datos recientes confirman lo que a simple vista se manifiesta en muchas gentes: la pobreza continúa creciendo en una suma y sigue imparable. Muy a pesar de las patrañas del Gobierno central, con sus filibusteros discursos de la recuperación económica, que sonrojan cualquier sensibilidad humana con un ápice de moral. En España el paro sique causando estragos en la población trabajadora. Este paro laboral y la inmoral Reforma Laboral de este mismo Gobierno, siguiendo las directrices del neoliberalismo internacional, que ponen en práctica con sus políticas más feroces e irracionalmente inhumanas.

Pobres son aquellas personas que tienen unos euros diarios para subsistir. Los que malviven con 7.961 euros al año, con un solo miembro en la familia: y de 16.720 euros al año, si son cuatro componentes (dos adultos y dos menores de 14 años) en la familia. Si tienen esa suerte, aunque sea pírrica la cantidad de poseerla. De lo contrario deben acudir a la caridad de los comedores sociales.

No es admisible que nuestra sociedad pueda pervivir dignamente con una población desempleada causante de esta miseria extrema: 5’4 millones de parados; 3’8 millones carecen de prestaciones subsidiarias; 2’3 millones de desempleados de largo tiempo; 1’8 millones de hogares con todos sus moradores en paro; 12’8 millones de españoles se encuentran en riesgo de pobreza y 728.500 hogares sin ningún tipo de ingresos.

Según la ONG, Save the Children, las dificultades para la vida, simplemente en condiciones de mínimas solvencias, en España han ido en progresivo aumento. Y muy especialmente, en los estudios y para la protección que realiza esta fundación humanitaria no lucrativa, para la clase más frágil de la sociedad: los niños y niñas menores de 16 años, las cuales han empeorado sus condiciones de vida alimentarias y otras prioridades vivenciales en los últimos periodos han empeorado.

La pobreza y exclusión social sigue aumentado en las familias españolas en 3,5 puntos. Sigue aumentando las diferencias sociales de clases por el poder adquisitivo, entre los que más y los que menos tienen. Por lo que disminuye, de forma alarmante, desde 2013. 1 de cada 3 menores de 16 años, está en esa situación de penuria. Y en las niñas la pobreza o exclusión social ha crecido en casi 5 puntos alcanzando el 35,3%. El número de niños con malnutrición y exclusión social alcanza en España casi los tres millones.

Tanto el paro laboral como los contratos laborales en precarios son las causas para la pérdida de la disminución de la capacidad adquisitiva en un 2,3%, de los hogares españoles que sigue decreciendo desde el año 2013.

A estas cifras sobre la pobreza por no tener un solo euro para la compra de alimentos de primera necesidad: alimentos y gastos en aguas de abastos y energías básicas, se añade afrontar los gastos imprevistos, a los que no pueden solucionar muchas familias. Y a esta tragedia se une la nueva pobreza emergente: la pobreza energética, a la que muchos hogares no pueden solventar. Por obra y gracia de las congracias que ha tenido el ministro de reppsol con las compañías eléctricas, a las que contentó con tantas arbitrarias subidas en el recibo de la luz de consumo. Una de las más caras de Europa. Pero él no cuenta en estas cifras de penuria, y además, estará próximo para atravesar por la puerta giratoria de su destino final.

Paradójicamente, esos mismos ejemplares que gobiernan este país, se enriquecen fraudulentamente con las ignominiosas corrupciones en los cargos que ocupan. En pasado año 2014 hubo 2000 imputados, por delitos de corrupción en España. En estudios de la Universidad de Las Palmas, cuantifican en 40.000 casos de corrupción en España. Y este año lleva las mismas trazas, y aún quedan muchas alfombras por levantar, en otros muchos casos habidos en determinados codiciosos y depravados administradores de los bienes públicos.

Pero en este territorio nuestro no a todos les va tan miserable. A las empresas del IBEX, han ganado más de 32.000 millones. Cifra mayor de lo que se invierte en las prestaciones por desempleo: 29.000 millones. Es incomprensible que un país con el mayor paro de toda Europa, en el que el consumo está prácticamente estancado, puedan las empresas de élite tener tantos beneficios. Algo falla, porque no cuadran las cuentas.

En nuestro país, con una pobreza galopante en tantas familias, la Iglesia católica no se resigna a sus votos de pobreza: recibe del dinero del erario público 11.000 millones anuales (y tiene el beneplácito estatal de no pagar el IBI como todos). Y el presupuesto del Ejército, se ha incrementado en tres veces en lo que va de año, que en nada se parece al remitido a las Cortes en los presupuestos generales del Estado.

Podemos rezar con toda la paz de espíritu de espacio sideral, porque no existen adeudos dinerarios en la iglesia vaticana. Y muy tranquilos estamos, porque somos salvaguardados por el armamento militar de tecnología puntera que se compra, y gasta, con el dinero de todos. Pero, si las gentes no se alimentan, carecen de energías para orar y dar gracias a dio de su pobreza extrema por designio celestial. Y el benefactor ejercito, para qué nos defiende de las armas y extraños peligros ajenos, si ya mata a tantas gentes la inanición y el desánimo en vivir en esta indigna sociedad de egoísmos perennes.

Ya deben tomar ejemplo de la futura alcaldesa de Madrid la señora la soviet Carmena, que destinará del presupuesto del consistorio, 79 millones para dar de comer a 106.000 personas que son producto de la desigualdad y las pésimas políticas que lleva los gobiernos de turnos en nuestro país.

Quien iba a pensar en nuestro país, que remontó en los años sesenta, por la industrialización y el turismo, después de tantas calamidades habidas desde antaño: pobreza ancestral, guerra civil y mundiales, que íbamos a retroceder en esta penuria a tiempos pasados de miserias imparables en tantas familias.

Datos recientes confirman lo que a simple vista se manifiesta en muchas gentes: la pobreza continúa creciendo en una suma y sigue imparable. Muy a pesar de las patrañas del Gobierno central, con sus filibusteros discursos de la recuperación económica, que sonrojan cualquier sensibilidad humana con un ápice de moral. En España el paro sique causando estragos en la población trabajadora. Este paro laboral y la inmoral Reforma Laboral de este mismo Gobierno, siguiendo las directrices del neoliberalismo internacional, que ponen en práctica con sus políticas más feroces e irracionalmente inhumanas.

Pobres son aquellas personas que tienen unos euros diarios para subsistir. Los que malviven con 7.961 euros al año, con un solo miembro en la familia: y de 16.720 euros al año, si son cuatro componentes (dos adultos y dos menores de 14 años) en la familia. Si tienen esa suerte, aunque sea pírrica la cantidad de poseerla. De lo contrario deben acudir a la caridad de los comedores sociales.