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El PP, Asociación Criminal para Delinquir

Tengo el firme convencimiento de que el Partido Popular debe ser ilegalizado. No es sólo por la sentencia de la primera parte del sumario de Gürtel, sino porque creo que es imposible que se regenere democráticamente, con Rajoy o sin Rajoy en la presidencia del partido. Aparte de las duras condenas que impuso el Tribunal de la Audiencia Nacional a los imputados en el asunto/trasunto que nos ocupa, el hecho de que el mismo tribunal niega la credibilidad de M. Rajoy en su testimonio cuando negó los pagos en B por parte del ex tesorero Luis Bárcenas, es motivo de otro delito. En un país serio, un jefe de gobierno que es cogido en una sola mentira, dimite automáticamente, y a Rajoy le crece cada vez más la nariz. No cabe la menor duda que el Partido Popular se ha comportado como una organización criminal constituida o usada para cometer delitos. Los numerosos cargos públicos y orgánicos procesados, incluidos todos sus tesoreros, indican que la actividad política del Partido Popular está íntimamente vinculada con su actividad delictiva y que el partido ha sido hasta ahora un instrumento para aquella. Son más de 400 cargos los procesados por actividades delictivas y entre los que se encuentran todos los antiguos tesoreros, hecho significativo, y hay una gran parte de las direcciones locales, autonómicas y estatales del PP inmersas en cuestiones prohibidas por las leyes. El mismo presidente del Gobierno es responsable máximo orgánico y operativo de actividades (campañas electorales, congresos, sedes, etc), que son causa específica de investigación criminal y aparece señalado como beneficiario directo de la financiación ilegal, y también sobrecogedor de los famosos sobres de Luis Bárcenas. El email que M. Rajoy le mandó a su ex tesorero “Luis, sé fuerte”, cuando estaba ya en prisión debería ser motivo de dimisión y procesamiento en cualquier país democrático.

En cuanto a la moción de censura presentada, y muy bien inscrita en el Congreso de los Diputados por el Partido Socialista Obrero Español, he comprobado una vez más como algunos periodistas y también políticos no se han estudiado la Constitución española, ni tampoco el reglamento del Congreso. Es penoso, lamentable, ver y escuchar a Francisco Marhuenda decir que Mariano Rajoy para frenar la moción de censura tenía que disolver las Cámaras y convocar elecciones de forma urgente, y tuvo la presentadora María Llapart en la Sexta aclararle a Paquito Marhuenda que desde que un partido presenta una moción de censura el Parlamento queda bloqueado hasta la celebración de la misma, y el Gobierno en el Poder no puede hacer ningún movimiento parlamentario y mucho menos convocar elecciones. Pero no quedó aquí la quisicosa en la ignorancia de Marhuenda, sino que poco tiempo después, en el mismo programa de la Sexta, José Manuel Villegas, flamante secretario general de Ciudadanos y a la sazón número dos del partido, cometió el mismo error que Marhuenda afirmando que Rajoy debería convocar elecciones generales. No habían caído en la cuenta de la normativa del Congreso sobre la cuestión de la moción de censura, y que Pedro Sánchez la había presentado apenas abrirse la oficina del Congreso para impedir precisamente cualquier movimiento de Rajoy. Todo esto, lo de Marhuenda y Villegas dicho en una televisión a nivel nacional, dando una impresión lamentable, enredándose Villegas en qué posición iba a tomar Ciudadanos en la moción de censura, un lio tremendo que a María Llapart terminó por irritarle.

La nueva posición del PSOE bienvenida sea, pero llevan mucho tiempo los socialistas bailando la yenka, un pasito palante, y dos patrás, pero de momento y hasta que no hagan un nuevo movimiento, Pedro Sánchez se ha decidido lanzarse al ataque, pero vaya usted a saber cuál será el contraataque interno de Felipe González, Alfonso Guerra, Rodríguez Ibarra, Pepe Bono, y toda la vieja guardia del partido. Me dice un amigo de Madrid especializado en política del PSOE en plan coña que Felipe González y su amplio grupo de derecha están pensando en fundar el Partido de las Puertas Giratorias de España. Vamos a ver si en Ferraz entran por fin aires de izquierda, y vuelvo a sentirme orgulloso de ser español por las querencias que tengo desde mi infancia, por mi admiración a Agustín Millares, Federico García Lorca, Rafael Alberti, Salvador de Madariaga, Blas de Otero, Luis Cernuda, María Zambrano, Francisco Ayala, y otros muchos escritores, poetas, artistas, a los que leía clandestinamente cuando estaban prohibidos en la España de Franco. De momento ser español al estilo de Albert Rivera es algo que no me complace, porque hay muchos que llevan una banderita en la manga de la camisa y hasta tatuada en el culo, y luego se llevan el dinero a Suiza o Panamá. Precisamente el presidente del Banco de Sabadell, Josep Oliu Creus, dijo en plena ascensión de Podemos, que había que crear un Podemos de derecha, y los banqueros han elegido a Albert Rivera y su partido Ciutadans, que nació en Catalunya y se ha extendido por toda España. Hay que tener en cuenta que ser español además no es una elección, te toca o no en función de unas circunstancias territoriales. Hay mucha gente que quiere serlo y no pueden por distintas razones, y otras que no quieren ser por otras y no tienen más remedio que aceptarlo.

Con respecto a los partidos canarios, en el caso de Coalición Canaria se le ha visto de nuevo su patita conservadora, y Ana Oramas y José Miguel Barragán han sido los encargados de proclamar su amor por Mariano Rajoy, y en el caso de Barragán su beligerancia contra Podemos, afirmando que “no vamos a permitir que con nuestro voto este país vaya a quedar en manos de los independentistas y de Podemos”, dijo entusiasmado y tal el portavoz de CC que ya no se parece en nada cuando comenzó su carrera política en Asamblea Majorera. En aquella época tenía hasta ciertas cosillas de izquierdoso, pero ahora se ha hecho más de derecha que Aznar, Rajoy y Rafael Hernando todos juntos. Y en lo que se refiere a Nueva Canarias, Pedro Quevedo ha explicado que su partido apoya la moción de censura de Pedro Sánchez contra Rajoy a raíz de la sentencia de Gürtel, para que los Presupuestos Generales del Estado puedan salir adelante, y no se vean paralizados por una convocatoria de elecciones inmediatas. Una vela a Dios, y otra al diablo, lo mismo que hizo el PNV, que el mismo día que apoyo los presupuestos de Rajoy pactó con Bildu en el Parlamento de Euskadi avanzar en un Estatuto independentista. Los nacionalismos pragmáticos tienen esas ventajillas. Con todo esto, lo que ya parece claro y jurídicamente reforzado, es que el Partido Popular es una Asociación Criminal para Delinquir.

Tengo el firme convencimiento de que el Partido Popular debe ser ilegalizado. No es sólo por la sentencia de la primera parte del sumario de Gürtel, sino porque creo que es imposible que se regenere democráticamente, con Rajoy o sin Rajoy en la presidencia del partido. Aparte de las duras condenas que impuso el Tribunal de la Audiencia Nacional a los imputados en el asunto/trasunto que nos ocupa, el hecho de que el mismo tribunal niega la credibilidad de M. Rajoy en su testimonio cuando negó los pagos en B por parte del ex tesorero Luis Bárcenas, es motivo de otro delito. En un país serio, un jefe de gobierno que es cogido en una sola mentira, dimite automáticamente, y a Rajoy le crece cada vez más la nariz. No cabe la menor duda que el Partido Popular se ha comportado como una organización criminal constituida o usada para cometer delitos. Los numerosos cargos públicos y orgánicos procesados, incluidos todos sus tesoreros, indican que la actividad política del Partido Popular está íntimamente vinculada con su actividad delictiva y que el partido ha sido hasta ahora un instrumento para aquella. Son más de 400 cargos los procesados por actividades delictivas y entre los que se encuentran todos los antiguos tesoreros, hecho significativo, y hay una gran parte de las direcciones locales, autonómicas y estatales del PP inmersas en cuestiones prohibidas por las leyes. El mismo presidente del Gobierno es responsable máximo orgánico y operativo de actividades (campañas electorales, congresos, sedes, etc), que son causa específica de investigación criminal y aparece señalado como beneficiario directo de la financiación ilegal, y también sobrecogedor de los famosos sobres de Luis Bárcenas. El email que M. Rajoy le mandó a su ex tesorero “Luis, sé fuerte”, cuando estaba ya en prisión debería ser motivo de dimisión y procesamiento en cualquier país democrático.

En cuanto a la moción de censura presentada, y muy bien inscrita en el Congreso de los Diputados por el Partido Socialista Obrero Español, he comprobado una vez más como algunos periodistas y también políticos no se han estudiado la Constitución española, ni tampoco el reglamento del Congreso. Es penoso, lamentable, ver y escuchar a Francisco Marhuenda decir que Mariano Rajoy para frenar la moción de censura tenía que disolver las Cámaras y convocar elecciones de forma urgente, y tuvo la presentadora María Llapart en la Sexta aclararle a Paquito Marhuenda que desde que un partido presenta una moción de censura el Parlamento queda bloqueado hasta la celebración de la misma, y el Gobierno en el Poder no puede hacer ningún movimiento parlamentario y mucho menos convocar elecciones. Pero no quedó aquí la quisicosa en la ignorancia de Marhuenda, sino que poco tiempo después, en el mismo programa de la Sexta, José Manuel Villegas, flamante secretario general de Ciudadanos y a la sazón número dos del partido, cometió el mismo error que Marhuenda afirmando que Rajoy debería convocar elecciones generales. No habían caído en la cuenta de la normativa del Congreso sobre la cuestión de la moción de censura, y que Pedro Sánchez la había presentado apenas abrirse la oficina del Congreso para impedir precisamente cualquier movimiento de Rajoy. Todo esto, lo de Marhuenda y Villegas dicho en una televisión a nivel nacional, dando una impresión lamentable, enredándose Villegas en qué posición iba a tomar Ciudadanos en la moción de censura, un lio tremendo que a María Llapart terminó por irritarle.