Espacio de opinión de Canarias Ahora
La pregunta del millón
No debemos engañarnos, los aumentos de productividad no crean empleo. Los periodos de alta productividad coinciden con los momentos de mayor crecimiento del PIB. Por ello es evidente que en los periodos de crisis o estancamiento económico la productividad es baja.
La productividad de un país se puede medir por el cociente entre el PIB y las horas trabajadas. Luego las actividades que generan mucho empleo al ser el cociente del denominador una cifra alta darán lugar a una productividad baja. Resumiendo las actividades económicas que dan lugar a una alta tasa de empleo generan tasas de productividad muy baja; y al contrario aquellas actividades con una alta productividad generarán escaso empleo. Las empresas con alta tecnología son importantes para aumentar la productividad del país, pero en los momentos actuales con más de cuatro millones de parados habrá que estimular proyectos emprendedores que reduzcan la tasa de desempleo.
Una actividad que generó riqueza y empleo en el pasado fue la construcción pero con lo que esta cayendo nos podemos olvidar de ella actualmente para que empuje al empleo. En el ámbito del sector servicios debemos buscar los proyectos de creación de empleo vinculados en el caso de Canarias a las actividades del turismo, con proyectos que mejoren la calidad de la oferta en infraestructuras públicas y privadas, incrementando la calidad de los servicios al visitante: de atención personalizada, de ocio, de restauración, de alimentación, de control de precios, etc.
¿Qué otras actividades de servicio crearían empleo? Las relacionas con el mundo de la educación, de la sanidad. Ambos sectores pueden crear economías de escalas importantes y factibles de desarrollar en Canarias. Actividades comprometidas con el mundo de los niños y su cuidado, también son generadoras de empleo de forma importante, y no menos interesante el segmento de población de los mayores, en un país con una tasa de envejecimiento elevada.
No nos podemos olvidar de las empresas exportadoras ya no por la generación de empleo, crean mayores niveles de productividad que de empleo, y son necesarias para inyectar liquidez a la economía del país. Por parecido motivo, importante es la atracción del capital extranjero pero ese reto requiere la presencia de un país saneado y equilibrado en sus magnitudes económicas. Teniendo en cuenta que el déficit publico fue en el año 2011 de unos 53.000 millones, un 5% del PIB, y que la cifra de enero a mayo de 2012 alcanzó 36.364 millones (aun teniendo en cuenta que este déficit recoge el adelanto efectuado por el estado a las administraciones territoriales y a la seguridad social en 7.787 millones), las previsiones al final del presente año estiman un déficit parecido al del año 2011. Nadie duda tras esas expectativas de déficit el inminente aumento de los impuestos en España. ¿Es factible la atracción de capital extranjero en la actual coyuntura?. A simple vista y a corto plazo parece complicado. Pero lo más complicado será generar empleo para ese gran número de parados y más teniendo en cuenta que un elevado porcentaje de ellos proceden del ladrillo. La pregunta es ¿en que sectores de actividad se piensa es factible su ubicación?. Esa sería la pregunta del millón.
Enrique Torres Curbelo
No debemos engañarnos, los aumentos de productividad no crean empleo. Los periodos de alta productividad coinciden con los momentos de mayor crecimiento del PIB. Por ello es evidente que en los periodos de crisis o estancamiento económico la productividad es baja.
La productividad de un país se puede medir por el cociente entre el PIB y las horas trabajadas. Luego las actividades que generan mucho empleo al ser el cociente del denominador una cifra alta darán lugar a una productividad baja. Resumiendo las actividades económicas que dan lugar a una alta tasa de empleo generan tasas de productividad muy baja; y al contrario aquellas actividades con una alta productividad generarán escaso empleo. Las empresas con alta tecnología son importantes para aumentar la productividad del país, pero en los momentos actuales con más de cuatro millones de parados habrá que estimular proyectos emprendedores que reduzcan la tasa de desempleo.