Canarias Ahora Opinión y blogs

Sobre este blog

Puerto de Santa Cruz de Tenerife: La victima de una nueva estrategia (III)

La mayor parte de los días del año, hago un seguimiento del puerto desde la larga avenida que va entre San Andrés y La Hondura. Con tranquilidad, sigo ese trayecto, pudiendo observar cualquier cambio que se produzca en esa gran industria que es la actividad portuaria. Desde ese maravilloso observatorio veo con entusiasmo cómo avanzan las obras de Ampliación de la Dársena del Este.

Esta obra que contempla la ampliación de las Terminales de Contenedores, se debe, todos lo sabemos, a un proyecto del propio organismo que estaba durmiendo el sueño de los justos y que, gracias a una iniciativa de los estibadores (Funesport), en un arrojo de valentía frente a la corriente oficial, optaron por presentar un estudio en el que reflejaba lo que ya hacía tiempo había asumido la propia Autoridad Portuaria y que no quería llevar adelante por miedo a no poder justificar el Puerto de Granadilla.

Los ataques al puerto de Santa Cruz desde las altas instancias del gobierno canario, de los parlamentarios, desde el Ayuntamiento capitalino o desde las organizaciones empresariales, tenían el fin común de justificar la construcción del puerto virtual de Granadilla, aunque fuese a costa de desprestigiar al puerto de Santa Cruz. En esas cocinas se cocinó la trama. De ellas salieron los cientos de artículos periodísticos demostrando lo “indemostrable”: El Puerto de Santa Cruz no tiene posibilidades de crecimiento y ya está colmatado. Nunca estuvo colmatado, pero sí a punto cuando lo convirtieron en “depot”, de los contenedores . Sus posibilidades de crecimiento no están agotadas y la Dársena Norte es un proyecto perfectamente viable, y ellos lo saben, el problema es que rectificar a estas alturas dejaría al descubierto la incompetencia y malas artes de muchos dirigentes políticos. Hay demasiadas presiones. Si el sentido común y los intereses de todos primaran se plantearía esta opción como una alternativa de presente y futuro para el Puerto de Santa Cruz.

La Santa Inquisición ?caciques de turno?, excomulgaron a “cuatro locos” del “SI al Puerto de Santa Cruz” y se tragaron la Ampliación de la Dársena del Este. La necesitaban para las cercanas elecciones. Acallar un poco el ruido o intento de nuevas manifestaciones. No olvidaban, pese a las descalificaciones, la de 18 Noviembre de 2006. ¿Dónde están ahora esas voces de reconocido prestigio local que descalificaron a aquellos que defendían que el crecer en Santa Cruz era posible? No se les oye, pero siguen en su apoyo al virtual puerto de Granadilla. Ríos de tinta corrieron y, al final, ahí está una muestra más de que no era cierta la imposibilidad de ampliación. Los líderes de ayer ya no están. Otros nuevos les sustituyen en la gestión política. Vienen con nuevas tácticas y sutilezas como pretender descatalogar el sebadal, especie que da su nombre al LIC del Sur, y quitar un escollo en su objetivo. La UE, como siempre, ciega y sorda al sentir de los ciudadanos no escucha a quienes la informan de que Granadilla no es un puerto de interés público para los ciudadanos, y que existe la posibilidad de ampliar el puerto de Santa Cruz. Es una aberrante decisión que partirá una isla y afectará a su economía.

“Está realmente agotada la capacidad de crecimiento en su actual ubicación del puerto de Santa Cruz” A esta conclusión ?decía el presidente de la Autoridad Portuaria en 2003?, han llegado organizaciones económicas tan reputadas como la CEOE-Tenerife y la Cámara de Comercio, Industria y Navegación de Santa Cruz de Tenerife. Y en un plano institucional, se han pronunciado también en este sentido desde el Ayuntamiento capitalino hasta el Cabildo Insular. En los últimos días, políticos con peso específico en Tenerife han hablado de la ampliación vía Granadilla, y no todos para posicionarse precisamente con un rotundo “sí” a favor del actual proyecto de la Autoridad Portuaria tinerfeña. Todos juntos y revueltos “santificaron”, la “imposibilidad de crecimiento” del puerto de Santa Cruz.

En 2004, el presidente del Gobierno Canario, Martín Menis defendió Granadilla como una “dársena especializada” orientada a los graneles, el clinker y los combustibles líquidos, así como el gas. Sólo, cuando los muelles capitalinos estén funcionando al 100%, de su capacidad, “se desviará algún tipo de tráfico de transbordo a Granadilla”, dijo. Minutos antes, había “aceptado” la ampliación del puerto de Santa Cruz y su reconocimiento como el principal de la isla. Lo último, exigencia de su “compañero”, el alcalde capitalino. ¿Cuándo funcionará el puerto de Santa Cruz al 100%? Definitivamente nunca, quienes lo gestionan y obscuros intereses empresariales lo impedirán.

En las hemerotecas de los diarios de la región están recogidas, para la historia, extensas declaraciones de los líderes de los bandos del Sí a Santa Cruz y el No a Santa Cruz. Ellas permitirán desvestir de virtudes a todos aquellos de la doble moral que promovieron y comulgaron con las directrices oficiales de aceptar que el Puerto de Santa Cruz estaba imposibilitado al crecimiento. La ampliación de las Terminales del Dique del Este atestigua lo contrario y aún no están agotadas sus posibilidades de crecimiento. Mi experiencia en la gestión del puerto me permite afirmarlo con rotundidad. Decir lo contrario es mentir.

*Presidente de la Agrupación local del PSOE en Santa Cruz de Tenerife

Pedro Anatael Meneses Roqué*

La mayor parte de los días del año, hago un seguimiento del puerto desde la larga avenida que va entre San Andrés y La Hondura. Con tranquilidad, sigo ese trayecto, pudiendo observar cualquier cambio que se produzca en esa gran industria que es la actividad portuaria. Desde ese maravilloso observatorio veo con entusiasmo cómo avanzan las obras de Ampliación de la Dársena del Este.

Esta obra que contempla la ampliación de las Terminales de Contenedores, se debe, todos lo sabemos, a un proyecto del propio organismo que estaba durmiendo el sueño de los justos y que, gracias a una iniciativa de los estibadores (Funesport), en un arrojo de valentía frente a la corriente oficial, optaron por presentar un estudio en el que reflejaba lo que ya hacía tiempo había asumido la propia Autoridad Portuaria y que no quería llevar adelante por miedo a no poder justificar el Puerto de Granadilla.