Espacio de opinión de Canarias Ahora
Rebajas de personal
- Buenas tardes. - ¿Aquí han empezado ya las rebajas como en el resto del país? - Pues, sí señor, pese a algunas reticencias de la patronal más pequeñita y quisquillosa, que siempre le pone peros a todo. ¿En qué puedo servirle? - Bueno En principio, estoy buscando un poco de relleno para las listas electorales que estamos preparando en mi partido. Ya sabe: un material homologable, pero no excesivamente especializado ideológicamente, con una cierta polivalencia - Ya, ya Creo que tenemos en oferta varios trepas que le pueden interesar. Son maleables y se comportan como mascotas domésticas. Muy adaptables a cualquier programa, con trayectorias más o menos tecnocráticas, lo cual no les compromete a nada y que pueden rellenar vistosamente sus planchas electorales. Algunos, hasta con apellidos ilustres. Aquí tenemos, por ejemplo, un modelo multiusos que se adapta perfectamente, tanto por currículum, aspecto y carácter, a cualquiera de las siglas habituales: lo mismo sirve para un nacionalismo cálido y moderado que para una derecha políticamente centrada o para un socialismo light de los que ahora están tan de moda. El precio, como usted observará, resulta francamente ridículo - Muy bien. Envuélvamelo. Para un quinto lugar, me viene de perlas. - Inmediatamente, caballero. ¿Desea algo más?... - ¿Tiene usted algo en concejales corruptos con programa incorporado de transfuguismo?... - Naturalmente. De ese material estamos abastecidísimos, ya que como usted sabe, la mayoría está a punto de caducar. Pero, todavía son útiles para cualquier operación de emergencia. - ¿Por ejemplo? - Mire usted. Este edil con pinta tan seria y honrada es una verdadera ganga. Hasta hace un año cobraba un diez por ciento de comisiones y ahora se conforma con el tres. Su polivalencia, perfeccionada con un toque de amoralina, le permite conectarse con asombrosa perfección a los grupos mixtos. - Estupendo, Pues empaquétemelo también. - ¿Nada más, señor?... - De momento - ¿No le interesaría, para completar el lote, un periodista multiopinión y amplio barrido crítico-laudatorio capaz de cambiar el objetivo de sus alabanzas y de sus vituperios con una velocidad y una frecuencia pasmosa y en posesión aún de una firma acreditada entre la patronal y la clase política más pusilánime?... - Pues, no. De plumillas de esos estamos más que sobrados y, por barato que me lo ponga, me saldría del presupuesto. - Pues, nada, oiga. ¿A los otros se los lleva puestos? - No. Me los manda a la sede del partido, que allí le abonarán la factura. - Muchas gracias y buenas tardes. - Buenos días y no hay de qué. José H. Chela
- Buenas tardes. - ¿Aquí han empezado ya las rebajas como en el resto del país? - Pues, sí señor, pese a algunas reticencias de la patronal más pequeñita y quisquillosa, que siempre le pone peros a todo. ¿En qué puedo servirle? - Bueno En principio, estoy buscando un poco de relleno para las listas electorales que estamos preparando en mi partido. Ya sabe: un material homologable, pero no excesivamente especializado ideológicamente, con una cierta polivalencia - Ya, ya Creo que tenemos en oferta varios trepas que le pueden interesar. Son maleables y se comportan como mascotas domésticas. Muy adaptables a cualquier programa, con trayectorias más o menos tecnocráticas, lo cual no les compromete a nada y que pueden rellenar vistosamente sus planchas electorales. Algunos, hasta con apellidos ilustres. Aquí tenemos, por ejemplo, un modelo multiusos que se adapta perfectamente, tanto por currículum, aspecto y carácter, a cualquiera de las siglas habituales: lo mismo sirve para un nacionalismo cálido y moderado que para una derecha políticamente centrada o para un socialismo light de los que ahora están tan de moda. El precio, como usted observará, resulta francamente ridículo - Muy bien. Envuélvamelo. Para un quinto lugar, me viene de perlas. - Inmediatamente, caballero. ¿Desea algo más?... - ¿Tiene usted algo en concejales corruptos con programa incorporado de transfuguismo?... - Naturalmente. De ese material estamos abastecidísimos, ya que como usted sabe, la mayoría está a punto de caducar. Pero, todavía son útiles para cualquier operación de emergencia. - ¿Por ejemplo? - Mire usted. Este edil con pinta tan seria y honrada es una verdadera ganga. Hasta hace un año cobraba un diez por ciento de comisiones y ahora se conforma con el tres. Su polivalencia, perfeccionada con un toque de amoralina, le permite conectarse con asombrosa perfección a los grupos mixtos. - Estupendo, Pues empaquétemelo también. - ¿Nada más, señor?... - De momento - ¿No le interesaría, para completar el lote, un periodista multiopinión y amplio barrido crítico-laudatorio capaz de cambiar el objetivo de sus alabanzas y de sus vituperios con una velocidad y una frecuencia pasmosa y en posesión aún de una firma acreditada entre la patronal y la clase política más pusilánime?... - Pues, no. De plumillas de esos estamos más que sobrados y, por barato que me lo ponga, me saldría del presupuesto. - Pues, nada, oiga. ¿A los otros se los lleva puestos? - No. Me los manda a la sede del partido, que allí le abonarán la factura. - Muchas gracias y buenas tardes. - Buenos días y no hay de qué. José H. Chela