El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora
Admitir enmiendas, potestad del grupo proponente
Era mediante esa fórmula de la PNL, no permitida por el reglamento, con la que José Manuel Soria pretendía volver a trasquilar a los socialistas, en aplicación de su particular doctrina política de donde las dan las toman. Pero tampoco esta vez va a ser posible porque la moción saldrá como quieran los socialistas, ya que es un mecanismo parlamentario que deja en manos del grupo proponente la admisión o el rechazo de enmiendas, y estamos por asegurarles que Santiago Pérez no va a permitir que CC y PP le cuelen un forro. Pero en su intento por mangonear la reprobación, el mariachi Cabrera-Barragán trató de hacer otra pirula en la Junta de Portavoces: que excepcionalmente se permitiera un turno “de réplica” a todos los grupos parlamentarios. Con ello pretendían que el debate fuera cerrado por algunos de los dos portavoces que apoyan al Gobierno. Santiago Pérez no puso objeción a la propuesta excepcional, pero la condicionó a que, en aplicación del reglamento, el orden fuera de menor a mayor, con lo que cerrarían los socialistas. El mariachi se la envainó.
Era mediante esa fórmula de la PNL, no permitida por el reglamento, con la que José Manuel Soria pretendía volver a trasquilar a los socialistas, en aplicación de su particular doctrina política de donde las dan las toman. Pero tampoco esta vez va a ser posible porque la moción saldrá como quieran los socialistas, ya que es un mecanismo parlamentario que deja en manos del grupo proponente la admisión o el rechazo de enmiendas, y estamos por asegurarles que Santiago Pérez no va a permitir que CC y PP le cuelen un forro. Pero en su intento por mangonear la reprobación, el mariachi Cabrera-Barragán trató de hacer otra pirula en la Junta de Portavoces: que excepcionalmente se permitiera un turno “de réplica” a todos los grupos parlamentarios. Con ello pretendían que el debate fuera cerrado por algunos de los dos portavoces que apoyan al Gobierno. Santiago Pérez no puso objeción a la propuesta excepcional, pero la condicionó a que, en aplicación del reglamento, el orden fuera de menor a mayor, con lo que cerrarían los socialistas. El mariachi se la envainó.