La agencia favorita de Zerolo

Manuel Romero, como les decíamos, es un hombre muy activo y muy bien conectado, tanto en Canarias como en Madrid. Desde allí llegó una vez a Tenerife, aún en los 80, para conocer los carnavales. Entonces era concejal de la cosa en Santa Cruz Miguel Zerolo, que desde ese momento hizo buenas migas con él, que ocupaba la dirección de una revista de circulación nacional. Cuando el hoy alcalde llegó a consejero, le compró todas las ideas, unas nuevas y otras recicladas, desde aquella promoción en Moscú, hasta la muralla china, pasando por aquellos misiles con mucha mecha y poca dinamita que pincharon porque todavía no ha llegado el supositorio USA a Lanzarote. Su agencia gana en años alternos el concurso del montaje del stand de Fitur, en compañía de Atlantis Tenerife, y es la que, pese a no ser central de compra de medios, ganó el concurso para la campaña promocional de Canarias en la Península (1,8 millones). Ya se imaginarán cómo andan de calientes las agencias de toda la vida. Ahora fueron unos perros, veremos qué compramos más adelante.

Manuel Romero, como les decíamos, es un hombre muy activo y muy bien conectado, tanto en Canarias como en Madrid. Desde allí llegó una vez a Tenerife, aún en los 80, para conocer los carnavales. Entonces era concejal de la cosa en Santa Cruz Miguel Zerolo, que desde ese momento hizo buenas migas con él, que ocupaba la dirección de una revista de circulación nacional. Cuando el hoy alcalde llegó a consejero, le compró todas las ideas, unas nuevas y otras recicladas, desde aquella promoción en Moscú, hasta la muralla china, pasando por aquellos misiles con mucha mecha y poca dinamita que pincharon porque todavía no ha llegado el supositorio USA a Lanzarote. Su agencia gana en años alternos el concurso del montaje del stand de Fitur, en compañía de Atlantis Tenerife, y es la que, pese a no ser central de compra de medios, ganó el concurso para la campaña promocional de Canarias en la Península (1,8 millones). Ya se imaginarán cómo andan de calientes las agencias de toda la vida. Ahora fueron unos perros, veremos qué compramos más adelante.