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Ahora, atentos al pabellón en Fitur

La trapisonda detectada en la campaña de Los estadios de la felicidad, uno de los dispendios más extravagantes de cuantos ha promovido la Consejería de Turismo en su historia, se desencadenó a principios de noviembre, coincidiendo con la World Travel Market, la feria turística más importante de esta lado del mundo. En ella se montó un pabellón representativo de Canarias que supuso un gasto total de más de 715.000 euros, incluyendo la tarifa del uso de la superficie ocupada, el concurso de ideas convocado, la redacción del proyecto de ejecución, la dirección de obra y hasta la rueda de prensa fantasma por la que cobraron los arquitectos adjudicatarios para completar una cantidad por la que nadie ofrece explicaciones satisfactorias. Pero ahora llega Fitur, y en Promotur tiemblan para encontrar una fórmula de seguir adjudicando a los mismos el asunto sin que salte la liebre. Seguiremos atentos, a ver cómo lo hacen ahora.

La trapisonda detectada en la campaña de Los estadios de la felicidad, uno de los dispendios más extravagantes de cuantos ha promovido la Consejería de Turismo en su historia, se desencadenó a principios de noviembre, coincidiendo con la World Travel Market, la feria turística más importante de esta lado del mundo. En ella se montó un pabellón representativo de Canarias que supuso un gasto total de más de 715.000 euros, incluyendo la tarifa del uso de la superficie ocupada, el concurso de ideas convocado, la redacción del proyecto de ejecución, la dirección de obra y hasta la rueda de prensa fantasma por la que cobraron los arquitectos adjudicatarios para completar una cantidad por la que nadie ofrece explicaciones satisfactorias. Pero ahora llega Fitur, y en Promotur tiemblan para encontrar una fórmula de seguir adjudicando a los mismos el asunto sin que salte la liebre. Seguiremos atentos, a ver cómo lo hacen ahora.