Arcadio y Urbanismo

Ustedes van a pensar que la tenemos cogida con Arcadio Díaz Tejera, flamente portavoz de la mayoría mayoritaria de la oposición municipal en el Ayuntamiento de Las Palmas. Él ya lo cree así, a pesar de nuestros esfuerzos por darle ánimos para que pueda ejercer de modo eficiente y brillante la tarea que le toca defender los próximos cuatro años. Pero, la verdad, nos lo pone difícil el hombre. Este lunes la tuvo de nuevo, y esta vez no fue con los teléfonos móviles, los periódicos, la Ley de Bases de Régimen Local o la textura y tapizado de los sillones de la oposición. En esta ocasión le tocó el paquete a los funcionarios presentes en la Comisión de Urbanismo, que salieron espantados de la primera reunión por el afán de Arcadio por explicarles a qué debe limitarse el trabajo de los técnicos y cómo han de conducirse en su tarea para con los políticos. No decimos que no haya habido excesos de funcionarios más mandones que los representantes ciudadanos, pero parece que lo que volvieron a fallar fueron las maneras de poner los puntos sobre las íes. Los funcionarios preparan la retranca, lo cual contamos sólo a efectos informativos.

Ustedes van a pensar que la tenemos cogida con Arcadio Díaz Tejera, flamente portavoz de la mayoría mayoritaria de la oposición municipal en el Ayuntamiento de Las Palmas. Él ya lo cree así, a pesar de nuestros esfuerzos por darle ánimos para que pueda ejercer de modo eficiente y brillante la tarea que le toca defender los próximos cuatro años. Pero, la verdad, nos lo pone difícil el hombre. Este lunes la tuvo de nuevo, y esta vez no fue con los teléfonos móviles, los periódicos, la Ley de Bases de Régimen Local o la textura y tapizado de los sillones de la oposición. En esta ocasión le tocó el paquete a los funcionarios presentes en la Comisión de Urbanismo, que salieron espantados de la primera reunión por el afán de Arcadio por explicarles a qué debe limitarse el trabajo de los técnicos y cómo han de conducirse en su tarea para con los políticos. No decimos que no haya habido excesos de funcionarios más mandones que los representantes ciudadanos, pero parece que lo que volvieron a fallar fueron las maneras de poner los puntos sobre las íes. Los funcionarios preparan la retranca, lo cual contamos sólo a efectos informativos.