El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora
Arnáiz, trotando
No hubo necesidad de que colocáramos micrófonos fantasmas en la sala de embarque del aeropuerto de Barajas para enterarnos de la actitud que tiene José Manuel Arnáiz, presidente de la Autoridad Portuaria de Las Palmas, con el que fuera su mentor en el Gobierno, José Carlos Mauricio. Ambos venían de Bruselas, a donde acudieron por iniciativa del consejero a desbloquear el asunto del istmo de Santa Catalina, una vez el consejo de administración del puerto aceptó acatar la nulidad de aquello que se dio en llamar La Gran Marina. Testigos presenciales han descrito el penoso trote que describía Arnáiz alrededor de Mauricio. Uno de nuestros comunicantes lo describió de este modo tan gráfico: “Me recordaron a Shrek y el burro dando saltos a su alrededor; Mauricio con su paso imperturbable, seguro, mirada perdida, indiferencia hacia el entorno, mientras que Arnáiz hacía la ola a su alrededor reclamando algo de atención”. Esto es un corresponsal, lo demás son cáscaras de lapas.
No hubo necesidad de que colocáramos micrófonos fantasmas en la sala de embarque del aeropuerto de Barajas para enterarnos de la actitud que tiene José Manuel Arnáiz, presidente de la Autoridad Portuaria de Las Palmas, con el que fuera su mentor en el Gobierno, José Carlos Mauricio. Ambos venían de Bruselas, a donde acudieron por iniciativa del consejero a desbloquear el asunto del istmo de Santa Catalina, una vez el consejo de administración del puerto aceptó acatar la nulidad de aquello que se dio en llamar La Gran Marina. Testigos presenciales han descrito el penoso trote que describía Arnáiz alrededor de Mauricio. Uno de nuestros comunicantes lo describió de este modo tan gráfico: “Me recordaron a Shrek y el burro dando saltos a su alrededor; Mauricio con su paso imperturbable, seguro, mirada perdida, indiferencia hacia el entorno, mientras que Arnáiz hacía la ola a su alrededor reclamando algo de atención”. Esto es un corresponsal, lo demás son cáscaras de lapas.