Lo que está confirmado hasta el momento

Hasta el momento están confirmados los siguientes hechos: un coordinador de Seguridad Integral Canaria, en connivencia con cinco o seis de sus agentes, inventaban horas extras y servicios no prestados en el Cabildo para cobrar un sobresueldo, que era repartido entre todos ellos. El jefe del Servicio de Régimen Interior del Cabildo o su ayudante, Adrián del Pino, avalaban la realización de esos servicios en unos oficios que ahora mismo están bajo sospecha. El coordinador que estafaba a su empresa jugaba también para la competencia, Serramar, participando en reuniones preparatorias (incluido un almuerzo en Tamaraceite) para que esa empresa gaditana se hiciera con el concurso que hasta el momento gestiona Seguridad Integral Canaria. El coordinador, tras ser despedido, pasa a ser delegado de Serramar en Canarias. Su esposa intenta regalar una agenda de Tous a la consejera responsable de la adjudicación, Encarna Galván, que la rechaza. Con el insistente informe de Carlos Gutiérrez y de Adrián del Pino, el Cabildo adjudica en marzo provisionalmente el concurso a Serramar, pero esa adjudicación quedó en suspenso este miércoles.

Hasta el momento están confirmados los siguientes hechos: un coordinador de Seguridad Integral Canaria, en connivencia con cinco o seis de sus agentes, inventaban horas extras y servicios no prestados en el Cabildo para cobrar un sobresueldo, que era repartido entre todos ellos. El jefe del Servicio de Régimen Interior del Cabildo o su ayudante, Adrián del Pino, avalaban la realización de esos servicios en unos oficios que ahora mismo están bajo sospecha. El coordinador que estafaba a su empresa jugaba también para la competencia, Serramar, participando en reuniones preparatorias (incluido un almuerzo en Tamaraceite) para que esa empresa gaditana se hiciera con el concurso que hasta el momento gestiona Seguridad Integral Canaria. El coordinador, tras ser despedido, pasa a ser delegado de Serramar en Canarias. Su esposa intenta regalar una agenda de Tous a la consejera responsable de la adjudicación, Encarna Galván, que la rechaza. Con el insistente informe de Carlos Gutiérrez y de Adrián del Pino, el Cabildo adjudica en marzo provisionalmente el concurso a Serramar, pero esa adjudicación quedó en suspenso este miércoles.