Canarias Ahora Opinión y blogs

Sobre este blog

La portada de mañana
Acceder
Gobierno y PP reducen a un acuerdo mínimo en vivienda la Conferencia de Presidentes
Incertidumbre en los Altos del Golán mientras las tropas israelíes se adentran en Siria
Opinión - ¡Con los jueces hemos topado! Por Esther Palomera

Desmitificar a Parramón

Nuestras indagaciones periodísticas de muchos meses también han dado sus resultados, y en más de una ocasión la Policía se ha servido de ellas para alcanzar algunas metas muy interesantes. Eso significa no sólo que no tememos llegar hasta el final de las indagaciones, sino que lo deseamos, y colaboramos a tal tarea cada día. Por eso nos consideramos los primeros frustrados cuando conocemos por noticias de la más variada procedencia que el magistrado Parramón está bloqueado, que no tiene ni las pruebas ni la decisión para alcanzar la parte magra del escándalo de corrupción más importante que ha afectado al PP en su corta trayectoria de poder en el Gobierno de Canarias. Lamentablamente, el magistrado de la Operación Eolo no es ese juez estrella que vemos en las películas, rodeado de eficaces e incansables policías que levantan todas las alfombras, abren todas las puertas y preguntan a todos los sospechosos, testigos o transeúntes. No. Cuenta con unas escuchas telefónicas y con lo que le dice la Brigada de Policía Judicial. Y punto.

Nuestras indagaciones periodísticas de muchos meses también han dado sus resultados, y en más de una ocasión la Policía se ha servido de ellas para alcanzar algunas metas muy interesantes. Eso significa no sólo que no tememos llegar hasta el final de las indagaciones, sino que lo deseamos, y colaboramos a tal tarea cada día. Por eso nos consideramos los primeros frustrados cuando conocemos por noticias de la más variada procedencia que el magistrado Parramón está bloqueado, que no tiene ni las pruebas ni la decisión para alcanzar la parte magra del escándalo de corrupción más importante que ha afectado al PP en su corta trayectoria de poder en el Gobierno de Canarias. Lamentablamente, el magistrado de la Operación Eolo no es ese juez estrella que vemos en las películas, rodeado de eficaces e incansables policías que levantan todas las alfombras, abren todas las puertas y preguntan a todos los sospechosos, testigos o transeúntes. No. Cuenta con unas escuchas telefónicas y con lo que le dice la Brigada de Policía Judicial. Y punto.