El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora
Enfrentamiento entre periódicos
Es cierto que José Sánchez Rodríguez es un testigo excepcional porque estaba en aquella reunión en el hotel Mencey, cuando estuvo a punto de cerrarse la operación de El Día. Que lo llame a declarar la abogada de don José evita a la defensa de Carlos E. Rodríguez tener que ponerle en el compromiso cierto de acudir a decirle al juez cuál fue la realidad de aquel encuentro. Una historia, por lo demás, que el autor del artículo que motivó esta absurda demanda conoce al dedillo por el nada despreciable hecho de haber participado en las negociaciones. Esto quiere decir que la exigencia de búsqueda diligente de la verdad la tiene ampliamiente superada en este caso el periodista Carlos E. Rodríguez. Por cierto, juez y fiscal se opusieron a incorporar como pruebas sentencias de los pleitos entre El Día y el Diario de Avisos, periódico en el que se publicó el artículo objeto de la demanda. Pretende demostrar don José que lo que hay detrás es una campaña de desprestigio. Pero no coló.
Es cierto que José Sánchez Rodríguez es un testigo excepcional porque estaba en aquella reunión en el hotel Mencey, cuando estuvo a punto de cerrarse la operación de El Día. Que lo llame a declarar la abogada de don José evita a la defensa de Carlos E. Rodríguez tener que ponerle en el compromiso cierto de acudir a decirle al juez cuál fue la realidad de aquel encuentro. Una historia, por lo demás, que el autor del artículo que motivó esta absurda demanda conoce al dedillo por el nada despreciable hecho de haber participado en las negociaciones. Esto quiere decir que la exigencia de búsqueda diligente de la verdad la tiene ampliamiente superada en este caso el periodista Carlos E. Rodríguez. Por cierto, juez y fiscal se opusieron a incorporar como pruebas sentencias de los pleitos entre El Día y el Diario de Avisos, periódico en el que se publicó el artículo objeto de la demanda. Pretende demostrar don José que lo que hay detrás es una campaña de desprestigio. Pero no coló.