El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora
Se enfría la moción de La Oliva
Hizo bien el Partido Socialista en Fuerteventura en escuchar los sabios consejos del marqués, Domingo González Arroyo, sobre la conveniencia de esperar a después de las elecciones para desalojar a Coalición Canaria de la alcaldía de La Oliva. La moción, que todo el mundo da por bendecida y cerrada, habría de colocar a la socialista Rosa Fernández como alcaldesa, con Dominguito de capataz de obra, ya saben. Pero los socialistas, que andan crecidos, han dicho al PP (el que sea) que vale, pero que lo natural sería presentar una moción similar contra el presidente del Cabildo de Fuerteventura, Mario Cabrera. Si el PP aceptara el órdago, el marqués se quedaría como piloto del pacto de la avioneta y Águeda Montelongo regresaría a las clases de aerobic.
Hizo bien el Partido Socialista en Fuerteventura en escuchar los sabios consejos del marqués, Domingo González Arroyo, sobre la conveniencia de esperar a después de las elecciones para desalojar a Coalición Canaria de la alcaldía de La Oliva. La moción, que todo el mundo da por bendecida y cerrada, habría de colocar a la socialista Rosa Fernández como alcaldesa, con Dominguito de capataz de obra, ya saben. Pero los socialistas, que andan crecidos, han dicho al PP (el que sea) que vale, pero que lo natural sería presentar una moción similar contra el presidente del Cabildo de Fuerteventura, Mario Cabrera. Si el PP aceptara el órdago, el marqués se quedaría como piloto del pacto de la avioneta y Águeda Montelongo regresaría a las clases de aerobic.