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Me lo explique, por favor

Cuando el pleno estaba a punto de terminar, el portavoz socialista y ex alcalde de Arucas, Ángel Víctor Torres, pidió al alcalde que le explicara, por favor, qué cosa era esa del decreto de 750,75 euros por un condumio. Ponce se traspapeló un poco y empezó a hablar de “un desliz”, de “un error”, según el cual ese almuerzo lo debieron haber pagado los concejales a escote, y que lo que se iba a hacer a partir de ese momento era precisamente eso, exigir a cada uno de los once comensales sus 68,25 euros para reintegrarlos a las arcas públicas, porque el cheque oficial ya se había extendido. Un mes después, en el pleno del 4 de diciembre, Torres volvió a preguntar al alcalde, que aseguró que en realidad lo que ocurrió es que el Ayuntamiento adelantó el dinero porque los concejales no tenían esa cantidad encima en el momento de pedir la cuenta. La pasta ha sido devuelta, lo que nos lleva a preguntarnos dónde estuvo exactamente el desliz: ¿en ir a comer?, ¿en no llevar la cartera encima ninguno de los once?, ¿en hacer el decreto para pagarlo con dinero público?, ¿en ordenar a los servicios económicos hacer el cheque?, ¿en mandarlo al restaurante?, ¿en devolver las perras? ¿O el desliz se produjo en el PSOE, que descubrió el apaño?

Cuando el pleno estaba a punto de terminar, el portavoz socialista y ex alcalde de Arucas, Ángel Víctor Torres, pidió al alcalde que le explicara, por favor, qué cosa era esa del decreto de 750,75 euros por un condumio. Ponce se traspapeló un poco y empezó a hablar de “un desliz”, de “un error”, según el cual ese almuerzo lo debieron haber pagado los concejales a escote, y que lo que se iba a hacer a partir de ese momento era precisamente eso, exigir a cada uno de los once comensales sus 68,25 euros para reintegrarlos a las arcas públicas, porque el cheque oficial ya se había extendido. Un mes después, en el pleno del 4 de diciembre, Torres volvió a preguntar al alcalde, que aseguró que en realidad lo que ocurrió es que el Ayuntamiento adelantó el dinero porque los concejales no tenían esa cantidad encima en el momento de pedir la cuenta. La pasta ha sido devuelta, lo que nos lleva a preguntarnos dónde estuvo exactamente el desliz: ¿en ir a comer?, ¿en no llevar la cartera encima ninguno de los once?, ¿en hacer el decreto para pagarlo con dinero público?, ¿en ordenar a los servicios económicos hacer el cheque?, ¿en mandarlo al restaurante?, ¿en devolver las perras? ¿O el desliz se produjo en el PSOE, que descubrió el apaño?