Frente secundario

Nos pusimos a indagar en la generosidad de la Autoridad Portuaria de Las Palmas para con el Club Natación Metropole y -créannos- lo que hemos encontrado no tiene mucho sentido. No porque pueda parecer absurdo que el ente público venda 9.000 metros cuadrados en un sitio privilegiado por un millón de euros sin tener necesidades de liquidez, o porque estén previendo una operación de más largo alcance y enjundia. Ni porque el club, que sólo paga 216 euros al mes por ocupar esa concesión hasta dentro de veinte años, esté en necesidad de hacerse con la propiedad temiéndose lo peor en las próximas dos décadas. No, la ausencia de sentido viene dada porque el expediente es, a priori, limpio como una patena. Pero como contiene una sucesión de llamativas incongruencias oficiales, lo traemos a la consideración de todos ustedes para que, simplemente, se lo queden para siempre.

Nos pusimos a indagar en la generosidad de la Autoridad Portuaria de Las Palmas para con el Club Natación Metropole y -créannos- lo que hemos encontrado no tiene mucho sentido. No porque pueda parecer absurdo que el ente público venda 9.000 metros cuadrados en un sitio privilegiado por un millón de euros sin tener necesidades de liquidez, o porque estén previendo una operación de más largo alcance y enjundia. Ni porque el club, que sólo paga 216 euros al mes por ocupar esa concesión hasta dentro de veinte años, esté en necesidad de hacerse con la propiedad temiéndose lo peor en las próximas dos décadas. No, la ausencia de sentido viene dada porque el expediente es, a priori, limpio como una patena. Pero como contiene una sucesión de llamativas incongruencias oficiales, lo traemos a la consideración de todos ustedes para que, simplemente, se lo queden para siempre.