El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora
Fútbol y política no casan, alcalde
Lo del alcalde de Mogán y la familia de Silva tiene su historia, aunque Paquirrín mezcle churras con merinas en momento tan feliz como el del fútbol español, cual Urkullu pidiendo la victoria de Rusia. Resulta que el padre de David Silva, Fernando Jiménez, fue concejal de Deportes de Mogán en los mandatos anteriores de Francisco González, con Antonio Santana Flores y Juan Santana Artiles. Dicen quienes conocen bien el municipio que Fernando ha sido el mejor dirigente municipal deportivo que ha tenido Mogán, pero cuestiones de infidelidades políticas a la familia de Paquirrín han hecho de los Silva unos apestados para quien dirige el ayuntamiento. Prueba de ello, constatan en Arguineguín, es que el alcalde ni se dignó a aparecer cuando el pueblo siguió por pantallas gigantes los partidos decisivos de España. Y constancia mayor queda en la fonotecas de la Ser cuando los compañeros de Las Palmas preguntaron a la abuela de Silva por el alcalde...“¿Ese? Ese no viene nunca por aquí”. Pero anoche sí.
Lo del alcalde de Mogán y la familia de Silva tiene su historia, aunque Paquirrín mezcle churras con merinas en momento tan feliz como el del fútbol español, cual Urkullu pidiendo la victoria de Rusia. Resulta que el padre de David Silva, Fernando Jiménez, fue concejal de Deportes de Mogán en los mandatos anteriores de Francisco González, con Antonio Santana Flores y Juan Santana Artiles. Dicen quienes conocen bien el municipio que Fernando ha sido el mejor dirigente municipal deportivo que ha tenido Mogán, pero cuestiones de infidelidades políticas a la familia de Paquirrín han hecho de los Silva unos apestados para quien dirige el ayuntamiento. Prueba de ello, constatan en Arguineguín, es que el alcalde ni se dignó a aparecer cuando el pueblo siguió por pantallas gigantes los partidos decisivos de España. Y constancia mayor queda en la fonotecas de la Ser cuando los compañeros de Las Palmas preguntaron a la abuela de Silva por el alcalde...“¿Ese? Ese no viene nunca por aquí”. Pero anoche sí.