El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora
Con lo que ha hecho ese hombre
Algo debe haberse roto de manera traumática entre el ex presidente de la Cámara de Comercio de Las Palmas, ex diputado y ex coordinador empresarial para dar lugar a tan duro escrito de renuncia por parte de su letrado. Porque mira que ese hombre ha hecho de todo por defender a su patrocinado, mucho más de lo que mandan los cánones de la abogacía hasta implicarse de manera personal en la causa. Luchó a brazo partido para que el Zorro Plateado no entrara en prisión por haber violado los términos de su suspensión de condena tras amenazar con una pistola a Josefina Navarrete: trató de culpar a la policía, a los mecanismos que pitan cuando el condenado se acerca a su víctima, y a la propia víctima por acercarse a las pulseras delatoras. Fracasado en ese propósito y con el fin de que su patrocinado pudiera, al salir de prisión, extender el uso y disfrute de su mansión de Tafira Baja, donde se produjeron los hechos que condujeron a la condena, López Mendoza desplegó un amplísimo abanico de triquiñuelas y arterías para prolongar al máximo el procedimiento de divorcio. Para que se hagan una idea, la demanda de divorcio se presentó en febrero de 2012, y para saltarse el primer juicio, señalado para el 5 de marzo, López Mendoza alegó ese mismo día que no podía asistir a la vista porque le dolía la rodilla. No debía ser muy agudo el dolor porque también en esa misma jornada pudo presentar escrito para evitar que el juicio se celebrara el 3 de abril alegando que ya tenía señaladas otras declaraciones. Se señala entonces el juicio para el 15 de abril, pero ante la negativa de Josefina Navarrete a contestarle por tratarse de asuntos que están dilucidándose en la jurisdicción penal, la jueza suspendió el juicio aun habiendo comenzado. Qué suerte. Pero para meter el verano por medio, el 9 de julio presentó escrito alegando una lumbalgia, lo que obligó a otra suspensión sin apercibimiento a tan enfermizo letrado. Total, para no cansarles, el juicio se fijó para el 17 de octubre pero no se celebró hasta el 14 de noviembre de 2013. Dicen en el foro que esta ruptura de López Mendoza no será la única que protagonice. En su despacho ha habido hace meses desbandada de letrados y hasta de secretarias. En cuanto afloren las causas las acercaremos a nuestros curiosos lectores.
Algo debe haberse roto de manera traumática entre el ex presidente de la Cámara de Comercio de Las Palmas, ex diputado y ex coordinador empresarial para dar lugar a tan duro escrito de renuncia por parte de su letrado. Porque mira que ese hombre ha hecho de todo por defender a su patrocinado, mucho más de lo que mandan los cánones de la abogacía hasta implicarse de manera personal en la causa. Luchó a brazo partido para que el Zorro Plateado no entrara en prisión por haber violado los términos de su suspensión de condena tras amenazar con una pistola a Josefina Navarrete: trató de culpar a la policía, a los mecanismos que pitan cuando el condenado se acerca a su víctima, y a la propia víctima por acercarse a las pulseras delatoras. Fracasado en ese propósito y con el fin de que su patrocinado pudiera, al salir de prisión, extender el uso y disfrute de su mansión de Tafira Baja, donde se produjeron los hechos que condujeron a la condena, López Mendoza desplegó un amplísimo abanico de triquiñuelas y arterías para prolongar al máximo el procedimiento de divorcio. Para que se hagan una idea, la demanda de divorcio se presentó en febrero de 2012, y para saltarse el primer juicio, señalado para el 5 de marzo, López Mendoza alegó ese mismo día que no podía asistir a la vista porque le dolía la rodilla. No debía ser muy agudo el dolor porque también en esa misma jornada pudo presentar escrito para evitar que el juicio se celebrara el 3 de abril alegando que ya tenía señaladas otras declaraciones. Se señala entonces el juicio para el 15 de abril, pero ante la negativa de Josefina Navarrete a contestarle por tratarse de asuntos que están dilucidándose en la jurisdicción penal, la jueza suspendió el juicio aun habiendo comenzado. Qué suerte. Pero para meter el verano por medio, el 9 de julio presentó escrito alegando una lumbalgia, lo que obligó a otra suspensión sin apercibimiento a tan enfermizo letrado. Total, para no cansarles, el juicio se fijó para el 17 de octubre pero no se celebró hasta el 14 de noviembre de 2013. Dicen en el foro que esta ruptura de López Mendoza no será la única que protagonice. En su despacho ha habido hace meses desbandada de letrados y hasta de secretarias. En cuanto afloren las causas las acercaremos a nuestros curiosos lectores.