Inspector Cortezo

“A Jaime Cortezo, ni agua”. La frase sentó como una patada en el bajo vientre al promotor inmobiliario Jaime Cortezo Massieu cuando se la trasladó un destacado dirigente del Partido Popular tras terminar una reunión del partido. La había pronunciado apenas unas horas antes el presidente regional del PP, José Manuel Soria, irritadísimo con el empresario por las presiones que éste ejerce para conseguir sus propósitos a través de la denostada emisora Barrilete Broadcasting. “Pero ni agua”, enfatizó encolerizado el ex vicepresidente del Gobierno ante la insistencia de uno de sus interlocutores, que trataba de situar a Cortezo en el bando de los buenos. Y a partir de esos momentos, el promotor de Hoya Pozuelo, el fabuloso inversor del islote del Francés, en Arrecife, donde amenaza con un icono urbanístico, juró venganza, juró que Soria lo pasaría fatal hasta el resto de su existencia política. Y ha empezado a cumplir con su juramento.

“A Jaime Cortezo, ni agua”. La frase sentó como una patada en el bajo vientre al promotor inmobiliario Jaime Cortezo Massieu cuando se la trasladó un destacado dirigente del Partido Popular tras terminar una reunión del partido. La había pronunciado apenas unas horas antes el presidente regional del PP, José Manuel Soria, irritadísimo con el empresario por las presiones que éste ejerce para conseguir sus propósitos a través de la denostada emisora Barrilete Broadcasting. “Pero ni agua”, enfatizó encolerizado el ex vicepresidente del Gobierno ante la insistencia de uno de sus interlocutores, que trataba de situar a Cortezo en el bando de los buenos. Y a partir de esos momentos, el promotor de Hoya Pozuelo, el fabuloso inversor del islote del Francés, en Arrecife, donde amenaza con un icono urbanístico, juró venganza, juró que Soria lo pasaría fatal hasta el resto de su existencia política. Y ha empezado a cumplir con su juramento.