El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora
José Ángel Martín, el favorito
Con la marcha de Julio Pérez, el PSOE canario pierde en Tenerife a un político de mucho recorrido, el único que en 2015 podría disputar cualquier cosa a cualquiera de los candidatos de Coalición Canaria que se presentara. Y al PP también. Su paso por el Ayuntamiento de Santa Cruz estaba dejando impronta: se había atrevido con el Plan General, esquivando las presiones y los atavismos heredados de Zerolo; se había atrevido a revisar la adjudicación de Emmasa, la empresa municipal de aguas adjudicada por el hoy senador del Reino de aquella forma tan sandunguera; se había atrevido a reclamar la devolución de los 52 millones de euros de Las Teresitas, lo que en Tenerife es mentar a la bicha? Con él, Pérez se lleva a otra de sus compañeras de bufete, Mónica Molina, lo que obligará al PSOE a mover el banquillo dos veces, a dar entrada en la Corporación al poliédrico Florentino Guzmán, a repartir las carteras y a buscar un portavoz que pueda dar la talla. Todo hace pensar que será el responsable de Urbanismo, José Ángel Martín, quien releve a Julio Pérez en esa tarea, lo que se convertirá sin duda en ofensa de leso tinerfeñismo para los que no quieren olvidar de por vida que fue este concejal el principal impulsor de la denuncia por corrupción de Las Teresitas, junto al tantas veces recordado estos días Santiago Pérez (y cierra el PSOE, que se coge una pulmonía). Pero no solo a esos pecados mortales habrá de enfrentarse Martín, sino a la triste realidad de un partido que no termina de recomponerse por culpa de unas irreconducibles peleas internas y por culpa de una dirección regional absolutamente desnortada.
Con la marcha de Julio Pérez, el PSOE canario pierde en Tenerife a un político de mucho recorrido, el único que en 2015 podría disputar cualquier cosa a cualquiera de los candidatos de Coalición Canaria que se presentara. Y al PP también. Su paso por el Ayuntamiento de Santa Cruz estaba dejando impronta: se había atrevido con el Plan General, esquivando las presiones y los atavismos heredados de Zerolo; se había atrevido a revisar la adjudicación de Emmasa, la empresa municipal de aguas adjudicada por el hoy senador del Reino de aquella forma tan sandunguera; se había atrevido a reclamar la devolución de los 52 millones de euros de Las Teresitas, lo que en Tenerife es mentar a la bicha? Con él, Pérez se lleva a otra de sus compañeras de bufete, Mónica Molina, lo que obligará al PSOE a mover el banquillo dos veces, a dar entrada en la Corporación al poliédrico Florentino Guzmán, a repartir las carteras y a buscar un portavoz que pueda dar la talla. Todo hace pensar que será el responsable de Urbanismo, José Ángel Martín, quien releve a Julio Pérez en esa tarea, lo que se convertirá sin duda en ofensa de leso tinerfeñismo para los que no quieren olvidar de por vida que fue este concejal el principal impulsor de la denuncia por corrupción de Las Teresitas, junto al tantas veces recordado estos días Santiago Pérez (y cierra el PSOE, que se coge una pulmonía). Pero no solo a esos pecados mortales habrá de enfrentarse Martín, sino a la triste realidad de un partido que no termina de recomponerse por culpa de unas irreconducibles peleas internas y por culpa de una dirección regional absolutamente desnortada.