Cuatro liberados comerciales

Se va a armar una buena en el sector de la seguridad privada canaria como consecuencia de un extrañísimo escrito que circula por despachos de empresarios y de responsables institucionales. Lo firman cuatro dirigentes sindicalistas de ese sector, y lo hacen en nombre de sus respectivos sindicatos, Comisiones Obreras, UGT, USO e Intersindical Canaria. Hasta ahí todo aparentemente normal, pero las rarezas empiezan cuando el lector se adentra en el contenido del escrito: se oponen a que la mayoría de las adjudicaciones públicas estén recayendo en la misma empresa, Seguridad Integral Canaria, a la que ponen a caer de un burro por unos supuestos “incumplimientos sistemáticos” de sus obligaciones laborales, sociales, tributarias y a la Ley de Seguridad Privada. Ante tal cúmulo de acusaciones, de las que tiene conocimiento incluso el presidente del Gobierno, cabe una primera pregunta: ¿qué hace todavía abierta esa empresa? ¿Nadie la ha empurado todavía? Porque el escrito dirigido a Adán Martín tiene fecha 8 de febrero, y ya ha llovido algo. Pero hay más rarezas.

Se va a armar una buena en el sector de la seguridad privada canaria como consecuencia de un extrañísimo escrito que circula por despachos de empresarios y de responsables institucionales. Lo firman cuatro dirigentes sindicalistas de ese sector, y lo hacen en nombre de sus respectivos sindicatos, Comisiones Obreras, UGT, USO e Intersindical Canaria. Hasta ahí todo aparentemente normal, pero las rarezas empiezan cuando el lector se adentra en el contenido del escrito: se oponen a que la mayoría de las adjudicaciones públicas estén recayendo en la misma empresa, Seguridad Integral Canaria, a la que ponen a caer de un burro por unos supuestos “incumplimientos sistemáticos” de sus obligaciones laborales, sociales, tributarias y a la Ley de Seguridad Privada. Ante tal cúmulo de acusaciones, de las que tiene conocimiento incluso el presidente del Gobierno, cabe una primera pregunta: ¿qué hace todavía abierta esa empresa? ¿Nadie la ha empurado todavía? Porque el escrito dirigido a Adán Martín tiene fecha 8 de febrero, y ya ha llovido algo. Pero hay más rarezas.