El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora
López Aguilar, cabreado y convencido
Mientras Juan Carlos Alemán lanza el guante a su propio secretario general para que recomponga en la plaza pública lo que se le atribuye como responsable, Juan Fernando López Aguilar devuelve el recado y remite a todo el mundo al dimisionario Spínola. Él es el que se marcha, el que dice que no existe un flujo de confianza que le permita continuar. Que se explique, le reclaman desde los cuarteles generales para la reelección del secretario general. Que diga qué pasó con los cargos de Cajacanarias, con la entrevista de hace unos días con Paulino Rivero, con las mociones de censura en Fuerteventura y La Gomera, con los incidentes previos a la asamblea de La Laguna, con la candidatura de Gloria Rivero en Santa Cruz... El ex ministro estaba este domingo muy cabreado, seguramente porque interpretó la dimisión de Spínola en la misma clave que muchos otros mandos socialistas: que López Aguilar no se presente a la reelección, que se marche para Europa y nos deje con nuestras cosas. Que vea lo que somos capaces de montarle.
Mientras Juan Carlos Alemán lanza el guante a su propio secretario general para que recomponga en la plaza pública lo que se le atribuye como responsable, Juan Fernando López Aguilar devuelve el recado y remite a todo el mundo al dimisionario Spínola. Él es el que se marcha, el que dice que no existe un flujo de confianza que le permita continuar. Que se explique, le reclaman desde los cuarteles generales para la reelección del secretario general. Que diga qué pasó con los cargos de Cajacanarias, con la entrevista de hace unos días con Paulino Rivero, con las mociones de censura en Fuerteventura y La Gomera, con los incidentes previos a la asamblea de La Laguna, con la candidatura de Gloria Rivero en Santa Cruz... El ex ministro estaba este domingo muy cabreado, seguramente porque interpretó la dimisión de Spínola en la misma clave que muchos otros mandos socialistas: que López Aguilar no se presente a la reelección, que se marche para Europa y nos deje con nuestras cosas. Que vea lo que somos capaces de montarle.