El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora
El 18 de marzo, a juicio el chalet de Esquivel
En medio de esta cacería tan chiripitifláutica en la que los pájaros disparan contra las escopetas, va el Juzgado de lo Penal número 2 de Las Palmas de Gran Canaria y señala para el próximo 18 de marzo juicio oral por el famoso caso del chalet de Esquivel. El acusado no es José Manuel Soria, qué va, aunque fuera él y su familia quienes habitaran en plan salmón (gratis total) el chalet del afamado empresario mientras se le tramitaban unas jugosas ventajas en el concurso eólico. El acusado es Carlos Sosa, director de este periódico, para el que Soria pide dos añitos de cárcel por contar la historia completa del chalet; los al menos 19 meses durante los cuales el vicepresidente del Gobierno no pagó ni un euro a Esquivel por habitar un inmueble que se cotizaba a 1.800 de renta antes de que entrara este ocupa; los favores que se le hicieron al empresario tratando de otorgarle por la cara el mejor campo de vientos de Europa, en el espigón del muelle de Arinaga, con la necesaria complicidad de Luis Soria y José Manuel Arnáiz, entre otras dignísimas autoridades.
En medio de esta cacería tan chiripitifláutica en la que los pájaros disparan contra las escopetas, va el Juzgado de lo Penal número 2 de Las Palmas de Gran Canaria y señala para el próximo 18 de marzo juicio oral por el famoso caso del chalet de Esquivel. El acusado no es José Manuel Soria, qué va, aunque fuera él y su familia quienes habitaran en plan salmón (gratis total) el chalet del afamado empresario mientras se le tramitaban unas jugosas ventajas en el concurso eólico. El acusado es Carlos Sosa, director de este periódico, para el que Soria pide dos añitos de cárcel por contar la historia completa del chalet; los al menos 19 meses durante los cuales el vicepresidente del Gobierno no pagó ni un euro a Esquivel por habitar un inmueble que se cotizaba a 1.800 de renta antes de que entrara este ocupa; los favores que se le hicieron al empresario tratando de otorgarle por la cara el mejor campo de vientos de Europa, en el espigón del muelle de Arinaga, con la necesaria complicidad de Luis Soria y José Manuel Arnáiz, entre otras dignísimas autoridades.