El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora
2,5 millones de pérdidas en 45 meses
La noticia de que el promotor inmobiliario de Hoya Pozuelo ya está vendiendo las frecuencias que de manera sorpresiva obtuvo en el reciente concurso de emisoras de radio nos animó a repasar el audio de la gloriosa entrevista que su Jiménez Losantos particular le hizo el pasado 8 de junio, 24 horas después de conocerse la adjudicación provisional de las 156 frecuencias. En ella, un eufórico Jaime Cortezo relataba cómo el proyecto lleva perdidos ya más de dos millones y medio de euros en tan sólo 45 meses, a razón de 55.555 euros por mes y que, cuando llegó al millón y medio anunció a los suyos que “se acabó”, que aquello era un saco sin fondo imposible de sostener por más tiempo. Una sangría económica que recordaba a los 600.000 euros perdidos por Tadeo, Germán Suárez y Juan Francisco García en aquella aventura de Radio Atlántico que acabó como el rosario de la aurora y con el Barrilete navegando sin rumbo en la inmensidad del cosmos. Pero a Cortezo lo convencieron sus más estrechos colaboradores y ha resistido un poco más. La llegada de las 32 frecuencias le originó un subidón, y en esa entrevista del 8 de junio lanzó su primera oferta pública de ampliación de capital, cuyo resultado es desconocido hasta el momento, al menos para nosotros. Por eso resulta sorprendente que haya empezado a vender frecuencias, y no las de menor cuantía, sino las más codiciadas.
La noticia de que el promotor inmobiliario de Hoya Pozuelo ya está vendiendo las frecuencias que de manera sorpresiva obtuvo en el reciente concurso de emisoras de radio nos animó a repasar el audio de la gloriosa entrevista que su Jiménez Losantos particular le hizo el pasado 8 de junio, 24 horas después de conocerse la adjudicación provisional de las 156 frecuencias. En ella, un eufórico Jaime Cortezo relataba cómo el proyecto lleva perdidos ya más de dos millones y medio de euros en tan sólo 45 meses, a razón de 55.555 euros por mes y que, cuando llegó al millón y medio anunció a los suyos que “se acabó”, que aquello era un saco sin fondo imposible de sostener por más tiempo. Una sangría económica que recordaba a los 600.000 euros perdidos por Tadeo, Germán Suárez y Juan Francisco García en aquella aventura de Radio Atlántico que acabó como el rosario de la aurora y con el Barrilete navegando sin rumbo en la inmensidad del cosmos. Pero a Cortezo lo convencieron sus más estrechos colaboradores y ha resistido un poco más. La llegada de las 32 frecuencias le originó un subidón, y en esa entrevista del 8 de junio lanzó su primera oferta pública de ampliación de capital, cuyo resultado es desconocido hasta el momento, al menos para nosotros. Por eso resulta sorprendente que haya empezado a vender frecuencias, y no las de menor cuantía, sino las más codiciadas.