El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora
Un par de direcciones generales ahí
No se quedará en lo que parece que se ha quedado el relevo en la Viceconsejería de Justicia y Seguridad. Ya saben que hay espectacular salto en la lista municipal de CC para dar paso al nuevo concejal, una vez haya quedado claro que Pedro Quevedo no quiere saber nada de Soria, al menos de momento y tan de cerca. Falta por ajustar los equilibrios internos de Coalición Canaria, porque Batllori es del CCN y seguirá siéndolo de momento, y Marino Alduán es de Ican, y seguro que seguirá siéndolo durante más tiempo aún. La teoría de compensar al CCN en mayo no ha sido bien recibida en el centro de Nacho, donde quieren al menos un par de direcciones generales. Para la primera que han mirado es para la del Menor, que la tiene en plan adjunta Francis Candil, el hombre de la Juventud divino tesoro. Pero quieren una o dos más, que aquí el que no corre tira al de delante. Marcial Morales se pondrá remolón, seguro, que no le gustan los experimentos con cosas tan delicadas como los menores, materia que no atraviesa precisamente por su mejor momento.
No se quedará en lo que parece que se ha quedado el relevo en la Viceconsejería de Justicia y Seguridad. Ya saben que hay espectacular salto en la lista municipal de CC para dar paso al nuevo concejal, una vez haya quedado claro que Pedro Quevedo no quiere saber nada de Soria, al menos de momento y tan de cerca. Falta por ajustar los equilibrios internos de Coalición Canaria, porque Batllori es del CCN y seguirá siéndolo de momento, y Marino Alduán es de Ican, y seguro que seguirá siéndolo durante más tiempo aún. La teoría de compensar al CCN en mayo no ha sido bien recibida en el centro de Nacho, donde quieren al menos un par de direcciones generales. Para la primera que han mirado es para la del Menor, que la tiene en plan adjunta Francis Candil, el hombre de la Juventud divino tesoro. Pero quieren una o dos más, que aquí el que no corre tira al de delante. Marcial Morales se pondrá remolón, seguro, que no le gustan los experimentos con cosas tan delicadas como los menores, materia que no atraviesa precisamente por su mejor momento.