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Opinión - Salvar el Mediterráneo y a sus gentes. Por Neus Tomàs

Ocho parcelitas y un paquete

El Grupo Santana Cazorla ha hecho un favor a los hermanos Reyes y a la señora Torres, que querían hacer la operación de la casa de San Rafael, donde dicen que quieren instalar un centro para disminuidos, ancianos y personas con dificultades motrices, cuando lo más llano que tiene aquello es el salón de la casa y para de contar. A cambio, ha conseguido lo que venía ansiando: que el Ayuntamiento le ceda ocho parcelas en La Mareta, frente al parque de bomberos, que complementan a la perfección otra pieza de suelo que este mismo consistorio le cedió a cambio de un edificio en Jinámar. Un edificio, por cierto, que también fue rechazado por la anterior Corporación al detectar los técnicos que no reunía las condiciones para convertirse en oficinas administrativas. Y a todas éstas, para calentar más el ambiente, la Junta de Gobierno Local, decidió este miércoles presentar una querella al concejal nacionalista Julián González por contar lo que sabe del asunto. A ver si ante el juez terminan de contarlo todo, porque hay más tomate, seguro.

El Grupo Santana Cazorla ha hecho un favor a los hermanos Reyes y a la señora Torres, que querían hacer la operación de la casa de San Rafael, donde dicen que quieren instalar un centro para disminuidos, ancianos y personas con dificultades motrices, cuando lo más llano que tiene aquello es el salón de la casa y para de contar. A cambio, ha conseguido lo que venía ansiando: que el Ayuntamiento le ceda ocho parcelas en La Mareta, frente al parque de bomberos, que complementan a la perfección otra pieza de suelo que este mismo consistorio le cedió a cambio de un edificio en Jinámar. Un edificio, por cierto, que también fue rechazado por la anterior Corporación al detectar los técnicos que no reunía las condiciones para convertirse en oficinas administrativas. Y a todas éstas, para calentar más el ambiente, la Junta de Gobierno Local, decidió este miércoles presentar una querella al concejal nacionalista Julián González por contar lo que sabe del asunto. A ver si ante el juez terminan de contarlo todo, porque hay más tomate, seguro.