Pepe 'el Chola', otro fichaje de bandera

La política, está más que dicho, hace extraños compañeros de cama. Pero también fabrica en sus enrevesados alambiques personajes imposibles de repetir si en la fórmula para su creación se aplicara un mínimo de coherencia. Es el caso de José Rodríguez, Pepe el Chola, como es cariñosamente conocido ese concejal que en este mandato ha sido edil del PSOE fijo discontinuo. Fue elegido en la lista de Conchi Narváez en 2007 después de abandonar Nueva Canarias por haberlo dejado fuera de la lista, y el PSOE lo acogió en su seno. Cuando estalló el conflicto de la cárcel en el municipio, el Chola se amuló y abandonó el grupo de gobierno, al que regresó disciplinariamente para terminar mandato, no fuera a ser que lo expedientaran. Paralelamente abrió negociaciones con NC, que ahora lo ha puesto de número 4 de su lista municipal antes incluso de que el interesado abandonara su militancia en el PSOE. La señora Narváez le acaba de abrir expediente tras llevar el disparate hasta el límite para tratar de salvar los 200 o 300 votos que dice tener en su cartera el polifacético concejal. Por cierto, el Chola, operario municipal, empezó en Coalición Canaria. Sólo le falta Agrupación de Vecinos, pero todo se andará.

La política, está más que dicho, hace extraños compañeros de cama. Pero también fabrica en sus enrevesados alambiques personajes imposibles de repetir si en la fórmula para su creación se aplicara un mínimo de coherencia. Es el caso de José Rodríguez, Pepe el Chola, como es cariñosamente conocido ese concejal que en este mandato ha sido edil del PSOE fijo discontinuo. Fue elegido en la lista de Conchi Narváez en 2007 después de abandonar Nueva Canarias por haberlo dejado fuera de la lista, y el PSOE lo acogió en su seno. Cuando estalló el conflicto de la cárcel en el municipio, el Chola se amuló y abandonó el grupo de gobierno, al que regresó disciplinariamente para terminar mandato, no fuera a ser que lo expedientaran. Paralelamente abrió negociaciones con NC, que ahora lo ha puesto de número 4 de su lista municipal antes incluso de que el interesado abandonara su militancia en el PSOE. La señora Narváez le acaba de abrir expediente tras llevar el disparate hasta el límite para tratar de salvar los 200 o 300 votos que dice tener en su cartera el polifacético concejal. Por cierto, el Chola, operario municipal, empezó en Coalición Canaria. Sólo le falta Agrupación de Vecinos, pero todo se andará.