El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora
Pasen y vean: así custodia el PP los actos institucionales ajenos
A la espera de que la delegada del Gobierno en Canarias, María del Carmen Hernández Bento, ofrezca las prometidas explicaciones sobre los incidentes del pasado viernes en el teatro Guimerá, de Santa Cruz de Tenerife, se le acumulan las pruebas en contra de su tesis de que todo fue culpa de la Guanchancha. Se desarrollaba en el interior del teatro el acto institucional del Día de Canarias, al que solo acudieron dos dirigentes del PP, el subdelegado del Gobierno y un concejal de La Laguna. Sabían en ese partido que iba a haber mojo con morena tras conocerse la víspera la autorización ambiental para las prospecciones de Repsol, y todo hacía presagiar –las redes sociales lo delataron con la convocatoria- que habría manifestantes. Y los hubo en número no superior a las 300 personas que se hicieron oír con sus pitos y consignas en el interior del coliseo. Al término del acto institucional, y cuando se iba a producir la actuación de un coro infantil de voces blancas, varias decenas de manifestantes atravesaron tan campantes el leve cordón policial apostado a las puertas del teatro para llegar hasta la cocina misma y gritar consignas contra el petróleo y contra los partidos políticos, particularmente contra los dos más representados allí, es decir, el PSOE y CC. Los manifestantes no tuvieron ningún impedimento para acercarse a las autoridades presentes, pero en ningún momento hubo violencia más allá de la tensión propia de un momento así. La actuación musical tuvo que ser suspendida y al día siguiente ya estaba el Gobierno canario reclamando una explicación a la delegada del Gobierno. Explicación que sigue sin llegar. Ya sabemos por qué.
Los diferentes raseros del PP
La delegada del Gobierno, lejos de anunciar una investigación que pudiera aclarar por qué la Policía flanqueó el paso de los manifestantes al interior del teatro, salió por peteneras a los pocos días amenazando con algo así como una trasquilada al Gobierno regional, insinuando que la fuerza actuante que se inhibió de sus obligaciones no fue la Policía Nacional, sino el Cuerpo General de la Policía Canaria, es decir, la Guanchancha. En el vídeo que ofrecemos a nuestros lectores no se atisba la presencia de ningún agente de este menguado cuerpo, y sí la de los del Cuerpo Superior de Policía que inicialmente presentan una actitud de custodia pasiva para, acto seguido, pasar al modo pasen y vean, mis niños, que dentro no hay nadie del PP que debamos custodiar. De todas maneras habrá que esperar a que se divulgue el informe policial que la señora Hernández Bento dice disponer desde el día siguiente de los incidentes, para así contrastar lo que dice con el testimonio de los testigos y las imágenes grabadas por algunos de ellos. De paso, convendría que la Delegación del Gobierno informara al público en general de los motivos por los que la Policía puso en libertad a los dos salvajes que el pasado 23 de mayo asaltaron el último mitin de Izquierda Unida Canaria en Santa Cruz de Tenerife. El ex guardia civil y su hijo que irrumpieron en el acto al grito de “comunistas jediondos” portando un machete y un martillo, ni siquiera fueron puestos a disposición judicial, sino liberados casi de inmediato, quizás para que pudieran dedicar la jornada de reflexión del día siguiente a convencer a sus conciudadanos de la conveniencia de votar a la Falange Auténtica.
Se presenta la plataforma Petróleo en Canarias
Tras la decisión del Ministerio de Medio Ambiente de aprobar la Declaración de Impacto Ambiental de las prospecciones de Repsol en Canarias se ha disparado de modo frenético la actividad propagandística del PP y sus satélites. La consigna vuelve a ser la bondad de esa actividad económica, los grandes beneficios que reportará a Canarias en ingresos y en puestos de trabajo, además de la nula o escasa incidencia en la industria turística local. Desde hace mucho tiempo funcionaban algunos intentos más o menos penosos de transmitir la posición gubernamental al respecto, fundamentalmente en las redes sociales. Una de ellas, Canarias Dice Sí, viene promovida por la empresa editora de PR Noticias, una web madrileña cuyo propietario, Pedro Aparicio, confirmó en su momento su autoría, justificada en su empeño por que resplandezca la verdad. Estos días se lanza Petróleo en Canarias, con web, presencia en redes sociales y un vídeo que no deja indiferente a nadie, tanto por su factura profesional (es decir, con medios técnicos y económicos suficientes) como por su zafiedad al retratar a una sociedad canaria desinformada y pelín maúra, a tenor de los diálogos que hacen repetir a los figurantes.
Un simpatizante del PP como productor
Hemos margullado un poco en la web en busca de los promotores de Petróleo en Canarias y nos hemos tropezado con un joven inquieto, un tinerfeño de nombre Miguel Ángel Rondón Segura, que no oculta en las redes sociales su abierta simpatía por el Partido Popular, militancia que sin embargo niega. Las hemerotecas lo delatan: en 2008 escribía en muro de Facebook de Rajoy una encendida defensa del hoy ministro Alberto Ruiz-Gallardón: “Gallardón tiene que estar en las listas. Él atrae al electorado que no se identifica con ningún partido. Nos hacen falta esos 2 ó 3 millones de votos”. Es, además, defensor de los combustibles fósiles, como demuestran otros trabajos videográficos producidos por él en América Latina, concretamente en Perú, donde aparece firmando un vídeo de 28 minutos de promoción gubernamental del país como destino inversor y de Petroperú, la petrolera oficial. Su currículo está entre la brillantez de su formación y el despropósito, porque aunque en alguna web aparece aún como funcionario de la embajada de España en Washington, en realidad estuvo allí como becario en 2009. Ha enviado su historial a la agencia de espionaje Stratfor, lo que le ha hecho merecedor de aparecer en los papeles de Wikileaks, según descubrió este martes el periodista tinerfeño David Cuesta. Nada se sabe, de momento, de los fondos con los que cuenta ni de su procedencia, lo que debería animar al PP a formular una pregunta parlamentaria en la misma línea que ha hecho siempre con los que el Gobierno canario ha empleado en su campaña contra las prospecciones. Quedamos también a la espera.
Terremoto en Telde: imputada la alcaldesa y el portavoz del PP
Cuando parecía que se alejaban los tristes ecos del pasado y amainaban los miedos a las acciones judiciales, ha vuelto el crujir de dientes al Ayuntamiento de Telde. Una jueza de la localidad, Virgina Peña, ha abierto las diligencias 2776/2013 en las que parecen estar encartados la alcaldesa de la ciudad, María del Carmen Castellano, y el portavoz de su partido, el PP, el defenestrado (parece que no a tiempo) Fran López. Ya ha empezado el desfile de imputados y de testigos para deponer ante su señoría por el famoso caso de las facturas indebidamente pagadas al empresario Ambrosio Jiménez por el affaire de La Mareta, del que es autor intelectual primigenio (y perdón por lo de intelectual) el inigualable concejal de Ciuca Guillermo Reyes. La alcaldesa, que figura como acusada en el caso Faycan, vuelve a los juzgados, pero esta vez en compañía de nuevos actores porque nuevos son los otros citados a declarar. Y no solo hay concejales, también altos funcionarios y cargos de confianza, como el irrepetible José Luis Mena, el chico para los trabajos más difíciles de ejecutar y de explicar. No hay muchos más detalles, pero los tendremos pronto, antes incluso del día 11, cuando acuda a su ciudad natal el ministro de Industria, José Manuel Soria, a ejercer de pregonero de las fiestas de San Juan. Será en la iglesia que honra al patrono, lo que ponemos en conocimiento de los servicios de información de la Policía y de la delegada del Gobierno para que esta vez sí monten un eficaz servicio de protección. Amén.
Ruano y su concepto de la renovación
Continúan, por lo demás, los debates abiertos en algunos partidos políticos (en el PP están pendientes aún de decidirse) en torno a las consecuencias del cataclismo provocado por las elecciones del pasado 25 de mayo. En el ámbito local, Coalición Canaria ve acercarse el día de su cónclave de candidatos sin que se atisbe un mínimo acercamiento entre las dos facciones hasta ahora identificadas: la que promueve que Paulino Rivero vuelva a presentarse como número uno y la que apadrinan los que quieren que sea Fernando Clavijo o Ani Oramas la apuesta nacionalista. Al debate se sumó esta semana el ex consejero José Miguel Ruano, que ha hecho una aportación grandiosa al concepto “renovación”. Ruano ha dicho a radio El Día que espera un gesto de generosidad de Rivero para que deje paso a otros compañeros y para que CC pueda “reinventarse” y conectar de nuevo con los ciudadanos. Hermosos palabros, sin duda, si no fuera porque provienen de quien lleva en esto de la política más de veinte años, siempre ocupando cargos públicos, sin que hasta la fecha se le haya apreciado la más mínima intención de ceder su silla a otro que no tenga a) esos resabios, y b) esa querencia nada simulada de entregarse en brazos del PP. Ruano pasa por ser el manager de Soria dentro del Gobierno (cuando lo compartieron) y en CC (para volver a compartirlo). Pero su reto se complica si tenemos en cuenta que las personas que promueve para su renovación llevan entre 25 y 20 años en la política, lo que seguramente será muy apreciado por el cuerpo electoral a la hora de decidir quiénes son los nuevos y quiénes son los viejos.
A la espera de que la delegada del Gobierno en Canarias, María del Carmen Hernández Bento, ofrezca las prometidas explicaciones sobre los incidentes del pasado viernes en el teatro Guimerá, de Santa Cruz de Tenerife, se le acumulan las pruebas en contra de su tesis de que todo fue culpa de la Guanchancha. Se desarrollaba en el interior del teatro el acto institucional del Día de Canarias, al que solo acudieron dos dirigentes del PP, el subdelegado del Gobierno y un concejal de La Laguna. Sabían en ese partido que iba a haber mojo con morena tras conocerse la víspera la autorización ambiental para las prospecciones de Repsol, y todo hacía presagiar –las redes sociales lo delataron con la convocatoria- que habría manifestantes. Y los hubo en número no superior a las 300 personas que se hicieron oír con sus pitos y consignas en el interior del coliseo. Al término del acto institucional, y cuando se iba a producir la actuación de un coro infantil de voces blancas, varias decenas de manifestantes atravesaron tan campantes el leve cordón policial apostado a las puertas del teatro para llegar hasta la cocina misma y gritar consignas contra el petróleo y contra los partidos políticos, particularmente contra los dos más representados allí, es decir, el PSOE y CC. Los manifestantes no tuvieron ningún impedimento para acercarse a las autoridades presentes, pero en ningún momento hubo violencia más allá de la tensión propia de un momento así. La actuación musical tuvo que ser suspendida y al día siguiente ya estaba el Gobierno canario reclamando una explicación a la delegada del Gobierno. Explicación que sigue sin llegar. Ya sabemos por qué.