El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora
Políticos de alta sensibilidad
El mismo día que Juan Luis Cebrián publicaba en El País un soberbio artículo contra la sentencia que condenó a dos periodistas de la Cadena Ser, supimos de cosas más cercanas, a la par que similares y grotescas, que ocurren en nuestra geografía isleña. El artículo de Cebrián, recomendable para periodistas, políticos y sobre todo jueces y fiscales, es de los que no deja escapatoria a los discordantes, sobre todo cuando concluye que, en aplicación de las pintorescas teorías del juez Ricardo Rodríguez, los corruptos han de estar en la calle y los que denuncian la corrupción, en la cárcel. Mira que nos suena, oye. Y decíamos que frente a la grandeza de una crítica valiente y directa a una chapuza de sentencia judicial que raya directamente la prevaricación, nos encontramos aquí con una concejal de Santa Brígida, la también valiente Victoria Casas, recibiendo burofax del alcalde Bravo de Laguna amenazándola con los tribunales por comentarios publicados en su blog. De fondo, la libertad de expresión y el derecho a la intimidad y a la propia imagen de los políticos.
El mismo día que Juan Luis Cebrián publicaba en El País un soberbio artículo contra la sentencia que condenó a dos periodistas de la Cadena Ser, supimos de cosas más cercanas, a la par que similares y grotescas, que ocurren en nuestra geografía isleña. El artículo de Cebrián, recomendable para periodistas, políticos y sobre todo jueces y fiscales, es de los que no deja escapatoria a los discordantes, sobre todo cuando concluye que, en aplicación de las pintorescas teorías del juez Ricardo Rodríguez, los corruptos han de estar en la calle y los que denuncian la corrupción, en la cárcel. Mira que nos suena, oye. Y decíamos que frente a la grandeza de una crítica valiente y directa a una chapuza de sentencia judicial que raya directamente la prevaricación, nos encontramos aquí con una concejal de Santa Brígida, la también valiente Victoria Casas, recibiendo burofax del alcalde Bravo de Laguna amenazándola con los tribunales por comentarios publicados en su blog. De fondo, la libertad de expresión y el derecho a la intimidad y a la propia imagen de los políticos.