Y los de Promotur, que son de traca

La verdad es que nunca sospechamos que alguien en la Consejería de Sanidad pudiera estar haciendo extrañas adjudiaciones jugando con las cosas de la salud, precisamente en un departamento que se queja constantemente de la deuda histórica del Estado y que reduce drásticamente los servicios y la calidad de los mismos por culpa del agujero negro generado y de la maldita crisis económica y sus recortes presupuestarios. Pero hay que revisarlo todo, no vaya a ser que el agujero tenga entre otras razones una relacionada con darle alegría y cosa buena a las amistades del PP. Y ya que andamos metidos en estos fregados, reclamemos al Gobierno o, en su defecto, a la oposición socialista, una revisión pormenorizada de todos los contratos otorgados estos últimos tres años y medio por Promotur, de la Consejería de Turismo. Porque nosotros todavía estamos esperando a que nos entreguen el expediente de aquellos 182.000 euros que Rita Martín empaquetó en favor del Grupo Intereconomía mediante un concurso absolutamente hediondo que sirvió para pagar la publicación del Soriagate en la revista Época. Pasará el tiempo que quieran demorarlo, pero estamos seguros que acabaremos dando con la madre de todas las hediondeces.

La verdad es que nunca sospechamos que alguien en la Consejería de Sanidad pudiera estar haciendo extrañas adjudiaciones jugando con las cosas de la salud, precisamente en un departamento que se queja constantemente de la deuda histórica del Estado y que reduce drásticamente los servicios y la calidad de los mismos por culpa del agujero negro generado y de la maldita crisis económica y sus recortes presupuestarios. Pero hay que revisarlo todo, no vaya a ser que el agujero tenga entre otras razones una relacionada con darle alegría y cosa buena a las amistades del PP. Y ya que andamos metidos en estos fregados, reclamemos al Gobierno o, en su defecto, a la oposición socialista, una revisión pormenorizada de todos los contratos otorgados estos últimos tres años y medio por Promotur, de la Consejería de Turismo. Porque nosotros todavía estamos esperando a que nos entreguen el expediente de aquellos 182.000 euros que Rita Martín empaquetó en favor del Grupo Intereconomía mediante un concurso absolutamente hediondo que sirvió para pagar la publicación del Soriagate en la revista Época. Pasará el tiempo que quieran demorarlo, pero estamos seguros que acabaremos dando con la madre de todas las hediondeces.