Se queja la Económica

La Real Sociedad Económica de Amigos del País en Las Palmas de Gran Canaria lleva un tiempo abriéndose a la sociedad, enseñando sus entrañas, organizando actos y promoviendo iniciativas que interesan a la ciudadanía. Lejos de la imagen apolillada que pudo haber tenido hace muchos años, la Económica es una entidad con enormes ganas de ser útil, para lo cual necesita unos mínimos. Tiene la suerte de ocupar el edificio de las antiguas academias municipales, al final de la calle Mendizábal, pero el Ayuntamiento, con la sensibilidad que le caracteriza, ha ido mordiéndole las instalaciones para cederlas a actividades para las que ese edificio es un desperdicio. Por ejemplo, no parece razonable que la planta baja, que da a la calle de Los Balcones, en pleno corazón de Vegueta, sea un local de ensayo y no una sala de exposiciones, como pretente la Real. Es cuestión de echarle un poquito de sentido común, no mucho más.

La Real Sociedad Económica de Amigos del País en Las Palmas de Gran Canaria lleva un tiempo abriéndose a la sociedad, enseñando sus entrañas, organizando actos y promoviendo iniciativas que interesan a la ciudadanía. Lejos de la imagen apolillada que pudo haber tenido hace muchos años, la Económica es una entidad con enormes ganas de ser útil, para lo cual necesita unos mínimos. Tiene la suerte de ocupar el edificio de las antiguas academias municipales, al final de la calle Mendizábal, pero el Ayuntamiento, con la sensibilidad que le caracteriza, ha ido mordiéndole las instalaciones para cederlas a actividades para las que ese edificio es un desperdicio. Por ejemplo, no parece razonable que la planta baja, que da a la calle de Los Balcones, en pleno corazón de Vegueta, sea un local de ensayo y no una sala de exposiciones, como pretente la Real. Es cuestión de echarle un poquito de sentido común, no mucho más.