La Red de Nardy

Se cumplen los tramos del calendario que les hemos venido dibujando acerca del destino político de María Bernarda Barrios, ex diputada del Partido Popular por la provincia de Las Palmas y máxima descubridora de cómo las gastan algunos de sus compañeros a la hora de aplicar los criterios del nuevo neoliberalismo democrático que todo lo invade. En Coalición Canaria siguen contando con ella, porque ya son más de dos los que están interviniendo en el proceso por parte nacionalista, por mucho que la líder natural de la Red de Ciudadanos lo niegue. Es verdad, sin embargo, que no ha fichado por CC, y hasta es muy posible que no lo haga a medio plazo, pero más por la aplicación de una estrategia bien medida que por falta de ganas. Al menos por la parte nacionalista de la parte contratante. Nardy va cumpliendo con su calendario, como les decíamos, y ha dejado caer como novedad más novedosa cómo es de terrible el PP canario, y cómo es de menos terrible, pero mucho menos, el PP de la calle Génova, con un Javier Arenas que debe saber mucho de los pasos de la ex diputada. No debe ser cuestión baladí esa separación a la hora de la crítica que ejerce la señora Barrios, que sabe más que el común de los mortales de la necesidad de separar muy bien la política de Canarias de la de Madrid, por mucho que en ambos contubernios anden metidos los mismos diciendo cosas tan diferentes.

Se cumplen los tramos del calendario que les hemos venido dibujando acerca del destino político de María Bernarda Barrios, ex diputada del Partido Popular por la provincia de Las Palmas y máxima descubridora de cómo las gastan algunos de sus compañeros a la hora de aplicar los criterios del nuevo neoliberalismo democrático que todo lo invade. En Coalición Canaria siguen contando con ella, porque ya son más de dos los que están interviniendo en el proceso por parte nacionalista, por mucho que la líder natural de la Red de Ciudadanos lo niegue. Es verdad, sin embargo, que no ha fichado por CC, y hasta es muy posible que no lo haga a medio plazo, pero más por la aplicación de una estrategia bien medida que por falta de ganas. Al menos por la parte nacionalista de la parte contratante. Nardy va cumpliendo con su calendario, como les decíamos, y ha dejado caer como novedad más novedosa cómo es de terrible el PP canario, y cómo es de menos terrible, pero mucho menos, el PP de la calle Génova, con un Javier Arenas que debe saber mucho de los pasos de la ex diputada. No debe ser cuestión baladí esa separación a la hora de la crítica que ejerce la señora Barrios, que sabe más que el común de los mortales de la necesidad de separar muy bien la política de Canarias de la de Madrid, por mucho que en ambos contubernios anden metidos los mismos diciendo cosas tan diferentes.