El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora
Y Rita, en El Charco
Mientras las dos damas emergentes de la política turística del PP se dan un baño de glamour en Manhattan, la jefa de todas ellas, la consejera Rita Martín, ha partido rumbo a La Aldea de San Nicolás para no perderse una de sus fiestas favoritas, El Charco. No hemos podido confirmar si la visita de la consejera tiene carácter oficial o si va como simple y sencilla parrandera a confundirse entre el público, meterse en el charco y tratar de atrapar una lisa con sus propias manos. Esta última modalidad (“perdida, y en el lodo... si tú me dices ven, lo dejo todo”) le permitiría ejercer como ojeadora de incógnito, a ver si también puede conceder a esas populares celebraciones aldeanas la categoría de “fiestas de interés turístico”, como acaba de anunciar que piensa hacer con las del Pino. Dicen que le animó a tal propósito el consejero del PP en el Cabildo Poli Suárez, que trabaja en Hecansa, empresa pública dependiente de la Consejería de Turismo. Él no es de Teror, sino de Moya, pero también le encanta una fiesta más que comer.
Mientras las dos damas emergentes de la política turística del PP se dan un baño de glamour en Manhattan, la jefa de todas ellas, la consejera Rita Martín, ha partido rumbo a La Aldea de San Nicolás para no perderse una de sus fiestas favoritas, El Charco. No hemos podido confirmar si la visita de la consejera tiene carácter oficial o si va como simple y sencilla parrandera a confundirse entre el público, meterse en el charco y tratar de atrapar una lisa con sus propias manos. Esta última modalidad (“perdida, y en el lodo... si tú me dices ven, lo dejo todo”) le permitiría ejercer como ojeadora de incógnito, a ver si también puede conceder a esas populares celebraciones aldeanas la categoría de “fiestas de interés turístico”, como acaba de anunciar que piensa hacer con las del Pino. Dicen que le animó a tal propósito el consejero del PP en el Cabildo Poli Suárez, que trabaja en Hecansa, empresa pública dependiente de la Consejería de Turismo. Él no es de Teror, sino de Moya, pero también le encanta una fiesta más que comer.