Servicio muy express

Al final nos hemos quedado todos con las ganas de ver legalizada la última trapisonda mediática del Cabildo grancanario, consistente en contratar por partida doble a la misma empresa para que le lleve el seguimiento de las noticias que afectan a la grandeza de Tamarán y a su líder. Ya saben que también era ilegal la segunda memoria justificativa para la contratación, mecachis en la mar, lo que significa que habrá que acudir al banco de datos de periodistas de plantilla a ver si alguno puede compulsar el desaguisado. Por cierto, brillante la impunidad con la que desde el 29 de septiembre se divulgaba en la web del Cabildo un servicio de recepción y noticias por SMS. Si no estamos equivocados, se trata del servicio de alertas por SMS que se intentó legalizar, vía informe patatero, el 4 de octubre. Tenemos lectores que se dieron de alta el 28 de septiembre y tienen guardado como oro en paño un informe del 2 de octubre, recibido en sus móviles, anterior a la comisión de contratación aquella tan chiripitifláutica. Hacen bien en guardarlo, porque será un incunable que jamás será investigado.

Al final nos hemos quedado todos con las ganas de ver legalizada la última trapisonda mediática del Cabildo grancanario, consistente en contratar por partida doble a la misma empresa para que le lleve el seguimiento de las noticias que afectan a la grandeza de Tamarán y a su líder. Ya saben que también era ilegal la segunda memoria justificativa para la contratación, mecachis en la mar, lo que significa que habrá que acudir al banco de datos de periodistas de plantilla a ver si alguno puede compulsar el desaguisado. Por cierto, brillante la impunidad con la que desde el 29 de septiembre se divulgaba en la web del Cabildo un servicio de recepción y noticias por SMS. Si no estamos equivocados, se trata del servicio de alertas por SMS que se intentó legalizar, vía informe patatero, el 4 de octubre. Tenemos lectores que se dieron de alta el 28 de septiembre y tienen guardado como oro en paño un informe del 2 de octubre, recibido en sus móviles, anterior a la comisión de contratación aquella tan chiripitifláutica. Hacen bien en guardarlo, porque será un incunable que jamás será investigado.