El sillón de Mercedes Sosa, para Yrichen

Pasó Mercedes Sosa por el auditorio del parque de San Juan, en Telde, dejando entre el público asistente todos los sentimientos que la música de la cantante ha ido acumulando a lo largo de tantos años de reivindicación y amor. La desapacible noche, el retraso de 45 minutos en el comienzo y hasta las quejas de la cantante por el frío no fueron suficientes motivos para que se rompiera la magia y las canciones más conocidas dejaran de ser coreadas con emoción. Abrigada con un poncho rojo y animada por su mate, Mercedes Sosa utilizó un butacón cedido para la ocasión por muebles Romelpe sobre el que la cantante finalmente estampó su firma como recuerdo de su paso por Telde. El sillón ha sido donado por el Ayuntamiento a la Fundación Yrichen, que lo subastará en su próxima gala benéfica anual, que se celebrará a final de año.

Pasó Mercedes Sosa por el auditorio del parque de San Juan, en Telde, dejando entre el público asistente todos los sentimientos que la música de la cantante ha ido acumulando a lo largo de tantos años de reivindicación y amor. La desapacible noche, el retraso de 45 minutos en el comienzo y hasta las quejas de la cantante por el frío no fueron suficientes motivos para que se rompiera la magia y las canciones más conocidas dejaran de ser coreadas con emoción. Abrigada con un poncho rojo y animada por su mate, Mercedes Sosa utilizó un butacón cedido para la ocasión por muebles Romelpe sobre el que la cantante finalmente estampó su firma como recuerdo de su paso por Telde. El sillón ha sido donado por el Ayuntamiento a la Fundación Yrichen, que lo subastará en su próxima gala benéfica anual, que se celebrará a final de año.