El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora
El síndrome del segundo informe
Volvió a armarse este miércoles en la mesa de contratación del Cabildo de Gran Canaria, y en esta ocasión con motivo de la decisión del grupo de gobierno de contratar a dos empresas que analicen los contenidos de la prensa y valoren cómo anda de bien la imagen de José Manuel Soria. Esta última faceta del contrato, aunque pueda parecer increíble, no le será facturada al PP, sino a la Corporación insular grancanaria. Cosas del abanderado, entendemos. Madrugan en el Cabildo porque a eso de las ocho y media de la mañana ya se estaba peleando la consejera de Hacienda con los consejeros de la oposición Isabel Guerra (PSOE) y Rafael Pedrero (NC) por el muy sutil hecho de que el informe con el que se pretendía justificar la contratación de esas empresas lo firmaba un asesor no competente para hacerlo. Se cabreó Rosa Rodríguez porque, además, alguien le dijo algo referido a la actitud “fascista de vigilar a la prensa” con fines perversos. Cabreada y todo, la consejera del PP tuvo que retirar la propuesta, no sin antes añadir una promesa en plan Scarlett O'Hara: convocaré una mesa de contratación urgente para las 13:50 horas “en la que se hará un informe y seguramente será positivo”. Ole.
Volvió a armarse este miércoles en la mesa de contratación del Cabildo de Gran Canaria, y en esta ocasión con motivo de la decisión del grupo de gobierno de contratar a dos empresas que analicen los contenidos de la prensa y valoren cómo anda de bien la imagen de José Manuel Soria. Esta última faceta del contrato, aunque pueda parecer increíble, no le será facturada al PP, sino a la Corporación insular grancanaria. Cosas del abanderado, entendemos. Madrugan en el Cabildo porque a eso de las ocho y media de la mañana ya se estaba peleando la consejera de Hacienda con los consejeros de la oposición Isabel Guerra (PSOE) y Rafael Pedrero (NC) por el muy sutil hecho de que el informe con el que se pretendía justificar la contratación de esas empresas lo firmaba un asesor no competente para hacerlo. Se cabreó Rosa Rodríguez porque, además, alguien le dijo algo referido a la actitud “fascista de vigilar a la prensa” con fines perversos. Cabreada y todo, la consejera del PP tuvo que retirar la propuesta, no sin antes añadir una promesa en plan Scarlett O'Hara: convocaré una mesa de contratación urgente para las 13:50 horas “en la que se hará un informe y seguramente será positivo”. Ole.