Sobada plateada

Esta Macaronesia nuestra no dejará nunca de sorprendernos con sus endemismos. La semana pasada celebróse en Cabo Verde la II Feria de la Macaronesia y hasta allí se llegó nuestro admirado José Miguel Suárez Gil, presidente de la Cámara de Comercio de Las Palmas, en compañía de 109 canarios más. Fueron tan duras las jornadas de trabajo y tantos los fraternales abrazos que tuvo que dar, que nuestro hombre regresó muy cansado, cansadísimo. En el vuelo chárter de la compañía pública Transportes Aéreos de Cabo Verde (TACV), fletado por la Cámara de Las Palmas, se produjo el acontecimiento: Suárez Gil cayó rendido, pero no en su butaca reclinable, sino sobre dos mantas, colocadas en el suelo, en el hueco anterior a la primera fila de asientos, con lo que cualquier viajero que quería ir hasta el baño debía saltar por encima de los pies de tan ilustre personaje de la Macaronesia.

Esta Macaronesia nuestra no dejará nunca de sorprendernos con sus endemismos. La semana pasada celebróse en Cabo Verde la II Feria de la Macaronesia y hasta allí se llegó nuestro admirado José Miguel Suárez Gil, presidente de la Cámara de Comercio de Las Palmas, en compañía de 109 canarios más. Fueron tan duras las jornadas de trabajo y tantos los fraternales abrazos que tuvo que dar, que nuestro hombre regresó muy cansado, cansadísimo. En el vuelo chárter de la compañía pública Transportes Aéreos de Cabo Verde (TACV), fletado por la Cámara de Las Palmas, se produjo el acontecimiento: Suárez Gil cayó rendido, pero no en su butaca reclinable, sino sobre dos mantas, colocadas en el suelo, en el hueco anterior a la primera fila de asientos, con lo que cualquier viajero que quería ir hasta el baño debía saltar por encima de los pies de tan ilustre personaje de la Macaronesia.