El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora
Soria reparte sus puyas entre Paulino y García
Lo mejor que tiene esto es lo malo que se está poniendo, dice el aguerrido refrán, que no sabemos si es popular, pero sí ocurrente. La huelga de los trabajadores de Videoreport Canarias está haciendo aflorar algunos efectos colaterales verdaderamente curiosos, como las fintas que José Manuel Soria hace a Paulino Rivero o las cada vez más ásperas relaciones entre el vicepresidente del Gobierno y el dueño de Canarias7, a su vez presidente del consejo de administración de la empresa suministradora de contenidos informativos de la Televisión Canaria. No deben perderse este suculento vídeo en el que Soria relata sus arduas gestiones ante Juan Francisco García para que se resuelva el conflicto laboral, una pose auténtica que realmente encierra su incontenible deseo de a) meterle un dedo en el ojo al editor periodístico, con el que anda ahora a la gresca y b) meterle otro dedo en un ojo al presidente del Gobierno, Paulino Rivero. Porque a estas alturas a nadie se le esconde que el señor Soria es el filtrador de aquella famosa noticia de los 3,5 millones de inyección extra a Radiotelevisión Canaria para la adquisición y forraje de estómagos agradecidos, y el inspirador de la posición tibia que el PP tuvo el miércoles en la comisión parlamentaria de control donde compareció Willy García.
Lo mejor que tiene esto es lo malo que se está poniendo, dice el aguerrido refrán, que no sabemos si es popular, pero sí ocurrente. La huelga de los trabajadores de Videoreport Canarias está haciendo aflorar algunos efectos colaterales verdaderamente curiosos, como las fintas que José Manuel Soria hace a Paulino Rivero o las cada vez más ásperas relaciones entre el vicepresidente del Gobierno y el dueño de Canarias7, a su vez presidente del consejo de administración de la empresa suministradora de contenidos informativos de la Televisión Canaria. No deben perderse este suculento vídeo en el que Soria relata sus arduas gestiones ante Juan Francisco García para que se resuelva el conflicto laboral, una pose auténtica que realmente encierra su incontenible deseo de a) meterle un dedo en el ojo al editor periodístico, con el que anda ahora a la gresca y b) meterle otro dedo en un ojo al presidente del Gobierno, Paulino Rivero. Porque a estas alturas a nadie se le esconde que el señor Soria es el filtrador de aquella famosa noticia de los 3,5 millones de inyección extra a Radiotelevisión Canaria para la adquisición y forraje de estómagos agradecidos, y el inspirador de la posición tibia que el PP tuvo el miércoles en la comisión parlamentaria de control donde compareció Willy García.