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OPINIÓN | 'Pesimismo y capitalismo', por Enric González

Supernacho

Este hombre es un auténtico ciclón. No se le había pasado el jet lag tras su periplo venezolano repartiendo cariño y parabienes (todavía no hay papeletas), cuando desembarcó directamente en Gran Canaria para asistir en Mogán la adhesión del Partido Independiente de Mogán al suyo de él, el Centro Canario de Nacho (CC-N). Naturalmente les hablamos de Ignacio González Santiago, que lleva una racha que no para. Sin apenas coger resuello, este martes se reunió con la plana mayor del CC-N en Gran Canaria tras darse un salto el lunes a Tenerife. Cerca de la medianoche, en plena sesión, recibió una llamada urgente del guardián de una de sus empresas, LItografía Saavedra, avisándole de que tenía una fuga de agua. Pues para Miller Bajo marchó nuestro hombre, y allí se le vio con los calzones remangados, fregona en ristre, achicando agua. Estaba para una foto, pero a nuestro infiltrado se le mojó la cámara.

Este hombre es un auténtico ciclón. No se le había pasado el jet lag tras su periplo venezolano repartiendo cariño y parabienes (todavía no hay papeletas), cuando desembarcó directamente en Gran Canaria para asistir en Mogán la adhesión del Partido Independiente de Mogán al suyo de él, el Centro Canario de Nacho (CC-N). Naturalmente les hablamos de Ignacio González Santiago, que lleva una racha que no para. Sin apenas coger resuello, este martes se reunió con la plana mayor del CC-N en Gran Canaria tras darse un salto el lunes a Tenerife. Cerca de la medianoche, en plena sesión, recibió una llamada urgente del guardián de una de sus empresas, LItografía Saavedra, avisándole de que tenía una fuga de agua. Pues para Miller Bajo marchó nuestro hombre, y allí se le vio con los calzones remangados, fregona en ristre, achicando agua. Estaba para una foto, pero a nuestro infiltrado se le mojó la cámara.