El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora
Teléfonos que echaban humo
No les vamos a contar aquí la que se armó este martes tras el show montado por Tony Rivero en la comida de Navidad de la Confederación Canaria de Empresarios porque ya se lo podrán imaginar. La práctica totalidad del empresariado se le ha tirado al cuello, además de formaciones políticas, logias, órdenes religiosas y ciudadanos en general. No nos consta reacción airada alguna del PP, y mucho menos de nuestro admirado Larry Álvarez, al que algunos mal pensados atribuyen la paternidad del discurso de Rivero. En la Confederación los teléfonos no pararon este martes, y hasta el analista menos sesudo sabe que el próximo día 22 se va a armar en la reunión que, salvo mejor criterio, celebrará el comité ejecutivo de la patronal de la provincia de Las Palmas. Allí, es de suponer, le cantarán las cuarenta en bastos a Tony, y él hasta tendrá que explicar qué desayunó la mañana de autos y cómo le dio por rendirse a los pies del liderazgo regional (incluso mundial) de José Manuel Soria. Mientras, Aiva, alegando que convocaron tarde, no quiso ni aparecer en la reunión con Femepa para el ingreso de la primera en la mesa de la CCE. Esto vuelve a ponerse al rojo, con perdón.
No les vamos a contar aquí la que se armó este martes tras el show montado por Tony Rivero en la comida de Navidad de la Confederación Canaria de Empresarios porque ya se lo podrán imaginar. La práctica totalidad del empresariado se le ha tirado al cuello, además de formaciones políticas, logias, órdenes religiosas y ciudadanos en general. No nos consta reacción airada alguna del PP, y mucho menos de nuestro admirado Larry Álvarez, al que algunos mal pensados atribuyen la paternidad del discurso de Rivero. En la Confederación los teléfonos no pararon este martes, y hasta el analista menos sesudo sabe que el próximo día 22 se va a armar en la reunión que, salvo mejor criterio, celebrará el comité ejecutivo de la patronal de la provincia de Las Palmas. Allí, es de suponer, le cantarán las cuarenta en bastos a Tony, y él hasta tendrá que explicar qué desayunó la mañana de autos y cómo le dio por rendirse a los pies del liderazgo regional (incluso mundial) de José Manuel Soria. Mientras, Aiva, alegando que convocaron tarde, no quiso ni aparecer en la reunión con Femepa para el ingreso de la primera en la mesa de la CCE. Esto vuelve a ponerse al rojo, con perdón.