El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora
Terror en Telde
Sólo faltaba en Telde lo que ha ocurrido con uno de los denunciantes de la trama de corrupción de Faycán. Unos desconocidos, probablemente mandados por alguien, han tratado de asustar a uno de los cuatro denunciantes de la presunta corrupción, un empresario pequeño, harto de ser extorsionado, que vio en peligro su empresa por las mordidas de los políticos municipales y se presentó a denunciar ante la Policía. Quien haya mandado a esos sicarios (si se confirman las sospechas más generalizadas) pretende que los que restan por hablar se callen, que no caiga nadie más en manos de la Justicia, que no aparezcan nuevos datos o que, incluso, lleguen a desaparecer los existentes. La Policía trabaja en algunas direcciones sin descartar cualquiera de ellas, y tiene mucho interés en mantener protegidos a los empresarios que han permitido destapar la trama de corrupción más grande de cuantas ha habido en Canarias.
Sólo faltaba en Telde lo que ha ocurrido con uno de los denunciantes de la trama de corrupción de Faycán. Unos desconocidos, probablemente mandados por alguien, han tratado de asustar a uno de los cuatro denunciantes de la presunta corrupción, un empresario pequeño, harto de ser extorsionado, que vio en peligro su empresa por las mordidas de los políticos municipales y se presentó a denunciar ante la Policía. Quien haya mandado a esos sicarios (si se confirman las sospechas más generalizadas) pretende que los que restan por hablar se callen, que no caiga nadie más en manos de la Justicia, que no aparezcan nuevos datos o que, incluso, lleguen a desaparecer los existentes. La Policía trabaja en algunas direcciones sin descartar cualquiera de ellas, y tiene mucho interés en mantener protegidos a los empresarios que han permitido destapar la trama de corrupción más grande de cuantas ha habido en Canarias.