El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora
Toñi Torres se pone bonita
Algo bonito ha pasado entre Toñi Torres, concejal del PP en Telde, en libertad bajo fianza, y el presidente de su partido, José Manuel Soria. De aquellos sinsabores, de aquel despecho, de aquellas durísimas insinuaciones, hemos pasado a que ambos compartan doctrina de modo sublime. Torres, que este jueves fue nombrada miembro de la Comisión de Contratación del Ayuntamiento de Telde (hay que ver qué acierto el del alcalde, de su propio partido) dijo en el pleno municipal que ella también tiene sospechas de la mano negra del ministro de Justicia para con los concejales y alcaldes del PP en Gran Canaria. Ole. Es decir, que se considera víctima de una conspiración política y no encausada en un asunto penal en el que se le acusa de unos delitos de mucho voltaje. En sentido contrario, las coincidencias con el que sigue siendo su jefe político (aún no consta de modo oficial que el PP la haya expulsado) se producen en materia de contratación. Porque si es cierto que la semana pasada escuchamos a Soria hablar de mesa de adjudicación eólica, esta semana vemos cómo sus pulcras doctrinas se estampan con lo que han hecho su correligionaria y su alcalde en Telde. Están bonitos ambos.
Algo bonito ha pasado entre Toñi Torres, concejal del PP en Telde, en libertad bajo fianza, y el presidente de su partido, José Manuel Soria. De aquellos sinsabores, de aquel despecho, de aquellas durísimas insinuaciones, hemos pasado a que ambos compartan doctrina de modo sublime. Torres, que este jueves fue nombrada miembro de la Comisión de Contratación del Ayuntamiento de Telde (hay que ver qué acierto el del alcalde, de su propio partido) dijo en el pleno municipal que ella también tiene sospechas de la mano negra del ministro de Justicia para con los concejales y alcaldes del PP en Gran Canaria. Ole. Es decir, que se considera víctima de una conspiración política y no encausada en un asunto penal en el que se le acusa de unos delitos de mucho voltaje. En sentido contrario, las coincidencias con el que sigue siendo su jefe político (aún no consta de modo oficial que el PP la haya expulsado) se producen en materia de contratación. Porque si es cierto que la semana pasada escuchamos a Soria hablar de mesa de adjudicación eólica, esta semana vemos cómo sus pulcras doctrinas se estampan con lo que han hecho su correligionaria y su alcalde en Telde. Están bonitos ambos.